María Camila Salazar y su hija, Andrea de Dios

María Eugenia Carvalho, al centro, en su casa en Medellín. Carvalho recolecta reciclaje para ganarse la vida, pero sus compradores cerraron en medio de la pandemia.
Familias venezolanas esperan un autobús que los lleve a la frontera. Habían caminado durante semanas, a menudo cargando niños a sus espaldas.

ULTIMAS NOTICIAS