La cantante y compositora colombiana de música electrónica lanzó en abril: “They told us it was hard, but they were wrong”. ARCADIA habló con ella sobre su última canción, su nueva alianza con Domino Records, y el confinamiento.
De Ratón Pérez a Balancer, y de ahí a Ela Minus. Con esa trayectoria Gabriela Jimeno puede presumir de transitar por extremos. De los instintos punk de sus inicios al indie de fórmula de sus años con Balancer y luego a un estilo más arriesgado y personal con su alter ego, resulta evidente esa curiosidad por descubrir y probar nuevas formas de hacer música.
Como Ela Minus, Jimeno encontró el espacio donde mejor puede articular esas inquietudes creativas que le surgen. Una serie de sencillos y EPs entre 2015 y 2018 la convirtieron en una consentida de los medios independientes a nivel nacional y latinoamericano. Tras lo que podría considerarse un periodo formativo de su propuesta, en septiembre del año pasado Ela Minus firmó con Domino Records, el mismo sello de Arctic Monkeys, Franz Ferdinand, Hot Chip y Juana Molina. La alianza con la nueva disquera le llegó al tiempo que preparaba el primer álbum largo de su carrera. Con presentaciones programadas en Estereo Picnic y Coachella, así como una gira acompañando a Caribou, 2020 prometía ser el año del despegue definitivo.
Desafortunadamente el coronavirus frustró estos planes y la obligó a mantenerse a salvo en su hogar de Nueva York, donde reside desde hace varios años. A pesar del encierro, en abril publicó el primer sencillo desde que firmó con Domino.
“They told us it was hard, but they were wrong” es atmosférica, punzante, algo bailable pero sin entregarse de lleno al desenfreno. Es evidencia del salto creativo de Jimeno.
Cuando ARCADIA habló con Ela Minus, la artista se mostró calmada ante la situación mundial y el impacto que ha tenido en su trabajo.
¿Cuál fue la inspiración detrás de “They told us it was hard, but they were wrong”?
La hice sola, pensando que quería que fuera como un himno de independencia y libertad para las personas. Que la canción los motive siempre que les digan que no pueden hacer algo y les recuerde que sí puedan, sin importar cuantas personas les hayan dicho que es imposible.
Háblanos del video que acompaña la canción
Yo tenía una idea para el video. Encontré este director (Will Dohrn), cuya carrera he venido siguiendo desde hace mucho tiempo, y comenzamos a trabajar juntos. Quería hacer muchas referencias a Colombia con la neblina y las montañas, y también jugar mucho con los colores.
¿Cómo llegó a firmar con Domino Records?
Yo tocaba batería para una banda que firmó con Domino, y solía abrir sus conciertos como Ela Minus. Conocí algunas personas que se interesaron en esa faceta mía, nos mantuvimos en contacto y en algún punto manifestaron interés por firmarme. La verdad es que son transparentes, se preocupan mucho por los artistas. Yo sabía que eran una disquera increíble por las bandas que tenían firmadas, pero experimentarlo en persona es otra cosa.
¿Cómo ha afrontado el aislamiento? ¿Cómo afecta la situación actual las actividades que tenía programadas para promocionar su próximo LP?
En estos momentos lo más importante es la salud y la familia. Son secundarios los conciertos cuando hablamos de una crisis que ha matado a miles de personas. Estaba emocionada por el año que se venía, pero en este contexto es lo menos importante. Ya veremos qué ocurre. No hay afán.
En lo que se refiere a la música como tal, pues ahora mismo hay un disco terminado, lo que es sumamente positivo. Me siento afortunada de estar en aislamiento y, aun así, poder compartir mi música con las personas, acompañarlas y darles alegría.
¿Qué tiene preparado para lo que queda del año?
Voy a lanzar una nueva canción en julio que se llama “El cielo no es de nadie“. Es en español y un poco más relajada. Cuando lancemos la nueva canción, seguramente anunciaremos todos los detalles del álbum.
Tomado del portal de al Revista Arcadia
