En la rueda de prensa de este viernes 6 de octubre, Paolo Ruffini, prefecto del Dicasterio para la Comunicación, ha informado sobre los temas tratados durante la congregación general de este 6 de octubre, respetando el “clima de confidencialidad” y la discreción requerida a todos los participantes.
Ruffini, también presidente de la Comisión para la información del Sínodo, ha explicado que durante las reuniones matinales los relatores de cada círculo menor, que se reunieron ayer jueves 5 de octubre, han expuesto diferentes cuestiones a la asamblea general, en la que ha participado el Papa Francisco. En concreto, han sido 22 relatores de 18 círculos menores que han tenido 3 minutos para hablar cada uno.
El prefecto ha enumerado los diferentes asuntos sin detenerse a explicar los argumentos y sin detallar los autores de los mismos.
Entre los temas debatidos destaca la “formación de todos, como la de los seminaristas, los laicos y los catequistas”. También subraya que ya desde el primer día se ha prestado una “particular atención” a los seminarios, así como a la necesidad de aumentar la presencia “materna” de las mujeres en la Iglesia.
La Eucaristía, la Liturgia, la “importancia de la liturgia dominical”, así como la oración y la misión de la Iglesia de “estar con los pobres y ser acogedora con los inmigrantes” son otros de los temas debatidos.
Destaca que están “aprendiendo a escuchar y a rezar” durante varios momentos a lo largo de las sesiones. También ha sido presentado a la asamblea general el tema de la “tecnología y los jóvenes” y, según Ruffini, “el riesgo de un acaparamiento del poder y la necesidad de vivir el servicio y abandonar ciertas actitudes”.
Para el prefecto de comunicación “la sinodalidad pertenece al ADN de la Iglesia” y remarca el ambiente “de fraternidad y amistad”.
Por su parte, Sheila Pires, responsable de comunicación de la Conferencia Episcopal Sudafricana, señaló a los periodistas que dentro del Sínodo “hay una atmósfera de alegría”, aunque también se perciben “algunas tensiones”.
Asimismo, Ruffini cita otros tópicos, como “el papel de la Iglesia como familia”, las responsabilidades de los obispos, el clericalismo y la función “paternal y maternal” de los pastores.
Ante la asamblea general también se ha puntualizado la necesidad de “revisar la estructura de la Iglesia”, así como “la dimensión de la Curia, iluminar la predicación y aumentar la fraternidad poniéndonos juntos en camino” para ser una Iglesia “acogedora”.
“La purificación de ciertas actividades dentro de la Iglesia contrarias al Evangelio”, “despertar el sacerdocio y la figura del catequista” y los abusos dentro de la Iglesia han sido otros de los asuntos tratados.
Por último, explica que también se ha señalado “la Tradición como fuente inseparable de la estructura” y la importancia de “estar en camino”.
Fuente: Aciprensa