Cómo preparar la Corona de Adviento

Este 3 de diciembre de 2023 la Iglesia inicia un nuevo Año Litúrgico con el tiempo del adviento.

Para acompañar este tiempo se aconseja tener en casa la Corona de Adviento, un signo que representa el primer anuncio de la Navidad.  A continuación le contamos qué elementos debe tener la corona y de dónde viene esta tradición.

La corona de adviento se hace con follaje verde sobre el que se insertan cuatro velas. Tres velas son moradas, una es rosada. El primer domingo de adviento encendemos la primera vela y cada domingo de adviento encendemos una vela mas hasta llegar a la Navidad. La vela rosada corresponde al tercer domingo y representa el gozo. Mientras se encienden las velas se hace una oración, utilizando algún pasaje de la Biblia y se entonan cantos.

Elementos y sus símbolos

Son 5 elementos que no deben faltar en la Corona de Adviento, pues cada uno representa un signo importante:

  • La forma circular: El círculo no tiene principio ni fin. Es señal del amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.
  • Las ramas verdes: Verde es el color de esperanza y vida. Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.
  • Las cuatro velas: Nos hacen pensar en la obscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo. Son cuatro velas las que se ponen en la corona y se prenden de una en una, durante los cuatro domingos de adviento al hacer la oración en familia.
  • Las manzanas rojas que adornan la corona: Representan los frutos del jardín del Edén con Adán y Eva que trajeron el pecado al mundo pero recibieron también la promesa del Salvador Universal. Estas pueden ser bolas navideñas, que los miembros de la familia pueden decorar.
  • El listón o cinta roja: Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve.

Su origen

Como otras tradiciones, la corona tiene sus raíces en costumbres pre-cristianas de los germanos (Alemania). Durante el frío y la oscuridad de diciembre, colectaban coronas de ramas verdes y encendían fuegos como señal de esperanza en la venida de la primavera. Por tanto, la corona de adviento no representa una concesión al paganismo sino, al contrario, es un ejemplo de la cristianización de la cultura. Lo viejo ahora toma un nuevo y pleno contenido en Cristo.

Siguiendo la Palabra del Señor, «Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida.», Jn, 8,12, reconocemos en las luces que encendemos en la corona de adviento que Cristo ha venido para vencer toda oscuridad. y nosotros, unidos a Jesús, también somos luz «Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte.” Mt 5,14

En el siglo XVI católicos y protestantes alemanes utilizaban este símbolo para celebrar el adviento: Aquellas costumbres primitivas contenían una semilla de verdad que ahora podía expresar la verdad suprema: Jesús es la luz que ha venido, que está con nosotros y que vendrá con gloria.


Con información publicada en Catholic.net