Consejo de una bruja dejó en el radar de la DEA al narco ‘Don Miguel’

Foto: Policía Judicial, Dijín

Miguel Antonio Meneses será extraditado a EE. UU. Tenía nexos con carteles mexicanos y con el Eln.

Miguel Antonio Meneses Meneses logró pasar inadvertido por casi cuatro décadas para las autoridades y era considerado como “un narco invisible”.

En el Cauca su vida era un mito, y con el paso de los años, en el mundo del narcotráfico llegó a ser uno de los grandes capos con nexos con carteles mexicanos.

Hoy, a sus 61 años, Meneses espera en una fría celda su extradición a Estados Unidos, donde una Corte de Dallas, Texas, lo solicita por delitos conexos con narcotráfico.

Era conocido con los alias de Don Miguel, el Ingeniero o el de la H. Meneses nació en el corregimiento La Herradura, de Almaguer, en Cauca, de allí el nombre de su estructura narcotraficante, ‘La H’, y su remoquete.

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“Siempre pensó que así le rendía un homenaje al lugar donde nació, es más, con el logo de una H marcaba los empaques de coca que traficaba”, dijo a EL TIEMPO uno de los investigadores de la Policía Judicial, Dijín, que estuvo al frente de su captura.

En su corregimiento es muy querido, y de acuerdo con los seguimientos realizados, desde hace varios años apoyaba económicamente a su círculo cercano, con bonos de hasta un millón de pesos, “y ahora, en medio de la pandemia, trató de cubrir el mayor número de personas en la región”, resaltó el investigador.

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Esa era además una estrategia para que no lo denunciaran, porque ‘Don Miguel’ tuvo por muchos años en La Herradura su centro de operaciones. Allí, aprovechando la zona rural, montó varios laboratorios para el procesamiento de cocaína.

Tener el control de los laboratorios le permitió a ‘Don H’ procesar la cocaína con un alto grado de pureza, lo que, frente a otros carteles, se convirtió en su carta de presentación.

Consejera espiritual 

Meneses era el típico narco invisible, cero excentricidades, su vida alejada de lujos, mujeres y licor. Pero tenía una debilidad, consultaba a una mujer que le realizaba rezos y cierres para la buena suerte, para que no lo traicionaran ni asesinaran.

“ ‘Don Miguel’ viajó a Guapí en Cauca, entre 2014 y 2017, de manera frecuente. En ese lugar se encontraba su asesora espiritual, como él la llamaba, y fue quien al parecer le dio vía libre para trasladarse a Costa Rica”, dijo el investigador.

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Y ese pudo haber sido su gran error. En 2017 se fue a vivir junto con su familia a San José de Costa Ric; para esa época, señaló el investigador, el hombre ya había logrado cerrar sociedad con el Eln.

En Costa Rica, ‘Don Miguel’ vivía cómodamente, sin excentricidades, su único lujo era un carro de alta gama. Allí consolidó sus nexos con carteles mexicanos, lejos de imaginar que la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) le venía siguiendo la pista a una red de narcotraficantes que estaba utilizando de plataforma países centroamericanos para trasladar cocaína de Colombia a Estados Unidos.

Es así como los agentes norteamericanos ponen en el radar a ‘Don Miguel’, a quien tras una exhaustiva investigación logran vincular a la red de narcos y expiden a finales de 2019 una orden de captura a nivel internacional en su contra con fines de extradición.

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Para esa época, el hombre ya había regresado al país, con una nueva identidad y bajo la fachada de un humilde campesino. ¿Cómo lo logró? De acuerdo con el general Fabio López, director de la Policía Judicial, Dijín, ‘Don Miguel’ fingió su muerte y “valiéndose de artimañas hizo cancelar su cédula de ciudadanía, en una sede de la Registraduría en Barranquilla”.

Por eso, cuando llegó la solicitud de extradición y las autoridades colombianas verificaron la identificación de Meneses, en el sistema apareció un certificado de defunción que señalaba que había fallecido por “muerte natural derivada de una enfermedad crónica que padecía”.

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Paralelo a ello, el narco invisible se hizo varias cirugías plásticas: mentón, pómulos y nariz para cambiar sus rasgos y así evitar ser identificado.

“Esto nos obligó a diseñar una estrategia, primero para verificar su muerte, que con base en un arduo trabajo investigativo corroboramos no era verdad”, aseguró el director de la Dijín, quien dijo que la segunda tarea fue ubicarlo e identificarlo.

“En este proceso, interactuamos de manera activa con la Fiscalía y la DEA. Desarrollamos labores de vigilancia y a través de la administración de fuentes de información se logró ubicar en una finca”, dijo el oficial.

De acuerdo con el general López, Meneses estaba en una finca de su propiedad, ubicada en Alcalá, Valle. Allí, él se estaba haciendo pasar como el administrador.

La historia criminal de ‘Don Miguel’

De acuerdo con las autoridades, ‘Don H’ diseño una completa estrategia para el envío de la cocaína desde  Suárez y Buenos Aires (Cauca) hacia los municipios costeros de López de Micay, Timbiquí y Guapi (Cauca). Allí, la embarcaban en lanchas tipo go-fast hacia países de Centroamérica y el destino final era Estados Unidos.

De igual forma, lo relacionan con el frente ‘Manuel Vásquez Castaño’ del Eln.

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La trayectoria delictiva de ‘Don Miguel’ “se remonta hacia los años 80, en su pueblo natal La Herradura de Almaguer, (Cauca), en donde empezó su vida en el narcotráfico, valiéndose de un químico experto en producción de cocaína de nacionalidad estadounidense enviado por el cartel de Medellín”, se lee en el expediente en su contra.


Tomado del diario EL TIEMPO