Consideran que es inconveniente la iniciativa en un momento que el crecimiento está cayendo y no hay medidas de choque para su recuperación
Para los empresarios colombianos, el argumento del Gobierno de bajar el impuesto de renta a las compañías, no los convence por los inconvenientes que eso puede generar en momentos en que la economía enfrenta una caída de casi todos sus sectores.
Esta medida sugerida por el Ejecutivo, es uno de los puntos que contiene la segunda reforma tributaria que quiere impulsar el gobierno del presidente de Gustavo Petro.
En una consulta de la Federación Nacional de Comerciantes a sus asociados, el 73% de los empresarios rechaza el anuncio de una nueva reforma tributaria.
Preocupaciones
El gremio que reúne a los comerciantes reveló los resultados que arrojo la nueva consulta en la que midieron la percepción que tienen sobre el futuro de la economía nacional y el caso en que se apruebe otra tributaria.
Allí se puede ver que siguen siendo varios los llamados de atención que han hecho desde Fenalco para que se cuiden los mensajes e instrumentos de la política económica.
Por eso, están revisando cuáles serían las problemáticas que podrían surgir en caso de seguir la iniciativa del Gobierno, incluso si fuera en pro de los empresarios.
Aunque lo que se conoce del proyecto de una tributaria es que tiene como objetivo intentar reducir la tasa nominal de renta de las empresas, rechazan esta posibilidad porque no es buena idea trasladar el sacrificio fiscal a las personas naturales, quienes sufrieron un drástico aumento con la ley 2277/22.
A ojos de los comerciantes, de aprobarse un proyecto de ley de esa índole, habría un coletazo fuerte para el consumo en el país dado que la gente preferiría seguir gastando para lo necesario.
Los comerciantes también expusieron las preocupaciones que más los aquejan en este momento en el país, en resumen, ha bajado la intensidad del problema de la escasez de mercancías, así como el aumento en los precios de las mismas, pero persiste el problema de la baja demanda y se acentúa notoriamente la percepción de inseguridad.
Asimismo, el 84% de los empresarios consultados afirmó que sus volúmenes de ventas fueron iguales o inferiores a los registrados en el mismo mes del año anterior (50% reportó ventas similares y el 34% disminución)
Mal balance
“Pésimo balance frente al registrado en los últimos tres meses y el peor febrero desde 2017. Esperamos que desde el segundo trimestre las condiciones de acceso a crédito sean más amigables para los colombianos”, afirmó Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco.
En cuanto a las expectativas, en general las empresas temen mayor enfriamiento en la demanda en el futuro inmediato, de hecho, un 47% piensa que la situación seguirá igual y un 26% se declara más pesimista.
En los resultados de la consulta, igualmente se destaca que los resultados de febrero es el peor desde 2017, es decir, siete años. En este siglo sólo en dos febreros se ha registrado variación negativa en ventas según el Dane: 2009 (-4.1%) como secuela de la crisis inmobiliaria iniciada en Estados Unidos y en 2017 (-7%), por efecto del aumento del IVA al 19%. Esta sería la tercera vez. La variación interanual en esta década para el mes en referencia ha sido de 13% en 2020, 1.2% en 2021, 4.9% en 2022 y 0.1% en 2023.
Reportes de supermercados y de los formatos de las llamadas tiendas de descuento indican que cuando se compara la actividad en tiendas iguales, es decir, sin tener en cuenta las aperturas de nuevos locales, las ventas en febrero estuvieron estancadas frente a las de hace un año.
Argumentos
El gobierno del presidente Gustavo Petro desde el año pasado viene hablando de la posibilidad de que en Colombia se tramite una nueva reforma tributaria.
Según la intención del ejecutivo esta iniciativa se va a centrar en ser un alivio para las empresas del país, que es el llamado de las mismas desde hace poco más de un año.
Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, detalló nuevos puntos sobre lo que sería esta nueva reforma tributaria para Colombia.
Explicó el encargado de las finanzas del país que será necesario revisar los detalles de lo que será ese proyecto de ley.
Pero recalcó en que no será una reforma que se establezca para que se generen más ingresos tributarios para Colombia, pues para eso fue la iniciativa que se debatió y aprobó en el Congreso.
“Presentarlo ahora para que empiece a correr los tiempos y congestionado con otros proyectos no es muy oportuno”, dijo Bonilla sobre la posibilidad de radicar de una vez esta nueva reforma tributaria.
Agregó el ministro Bonilla que, en ese sentido, “sería mejor entregarlo empezando el tercer periodo de sesiones del congreso”.
De esta manera, si se cumplen los tiempos mencionados por el ministro de Hacienda, el proyecto podría radicarse en el Congreso desde el mes de julio de 2024.
En todo caso, insisten desde el gobierno Petro que entienden la necesidad de quitarle carga impositiva a las empresas para mejorar las expectativas económicas del país.
“En el 2024 el peor mensaje que podemos dar es recortar gastos cuando lo que necesitamos es recuperar la economía y entonces el papel del Gobierno debe ser en quitar todo lo que está planillado en inversión. Ese planillado en inversión tiene obras índices y tiene vivienda dentro de sus parámetros importantes”, agregó Bonilla.
Las personas
Adicionalmente, la nueva reforma tributaria afectará a las personas de mayores ingresos, pretensión en la que ha insistido el Gobierno en los últimos meses.
Bonilla cree que la iniciativa no será un peso extra para los consumidores del país porque no se aplicaría para el grueso de la población.
El Gobierno ha defendido a su medida la posible modificación, ya que cree que una reducción a la tasa impositiva para las empresas sería una manera de mejorar las oportunidades de inversión de las empresas.
Pero, por ahora aseguran que, en caso de una eventual reforma tributaria en Colombia, primero se estudiaría con pinzas y luego sí se presentaría.
En cuanto a los empresarios, continúan haciendo el llamado sobre la tributaria que pretende el Gobierno, para ellos hoy es más importante, estar centrado en la actual problemática económica del país y en las medidas de choque que implemente el Ejecutivo.
Persiste caída en las ventas
Los comerciantes señalan que persiste la caída en las ventas de bienes durables como computadores, muebles, electrodomésticos y artículos para la remodelación del hogar, y bienes semidurables como textiles, vestuario, cuero y calzado.
Es generalizada la opinión de que al año comenzó con un consumo muy frenado, situación que persiste en febrero, pese a que en este año este mes trajo un día más y que numerosos comercios hicieron descuentos seleccionados superiores al 50% para animar a los clientes. Señala Fenalco que “esperamos que desde el segundo trimestre las condiciones de acceso a crédito sean más amigables para el consumidor, y es señal alentadora que la tasa de usura actual, del 33.3%, está en su nivel más bajo desde julio del 22. En materia de expectativas, el 27% de los encuestados considera que en el futuro inmediato las cosas mejorarán, un 47% piensa que seguirán igual y un 26% se declara más pesimista”.
Fuente: El Nuevo Siglo
