El ambicioso plan de la Comisión Regional de Conciliación y Paz del Tolima

Foto: Paz Estéreo

En la sede de la Curia Arzobispal de Ibagué se reunió este martes, por segunda vez en el año, la Comisión Regional de Conciliación, que pretende hacer un seguimiento a los acuerdos de paz firmados por el Estado Colombiano con la exguerrilla de las Farc, entre otras acciones.

Uno de los objetivos que se trazó la Comisión, al ser constituida, es el de escuchar a las comunidades, tener en cuenta sus necesidades, y así, entre todos, reconstruir el tejido social, destruido por el conflicto armado en Colombia, particularmente en nuestro territorio.

Teniendo en cuenta la diversidad cultural del departamento del Tolima, las necesidades e inquietudes de cada comunidad, se establecieron varias mesas de trabajo en municipios como Dolores, Icononzo, Planadas, Mariquita, Espinal, Honda y Líbano, entre otros, para articular con el territorio los planes de trabajo diseñados.

“Para desarrollar nuestro trabajo tenemos que tener en cuenta las características de cada comunidad, trabajar con el colectivo, creemos que la participación debe ser la del colectivo y no solo la de una parte de la comunidad, si bien es cierto que cesaron las confrontaciones, la paz es un tema que está en construcción, que cuesta y que llevará tiempo”, señala Antonio Melo Salazar Presidente Delegado de la Comisión Regional de Conciliación.

Sobre las dificultades para implementar los planes trazados por la Comisión Melo Salazar agregó. “Todos los procesos tienen dificultades, son difíciles, exigen un compromiso de todas las partes, más allá de las diferencias ideológicas estamos en el deber de establecer puntos en común, porque lo que no podemos seguir es en guerras y matándonos los unos a los otros”, concluyó.

La Comisión sigue unos derroteros y directrices que en materia de reconciliación y paz ha diseñado la Conferencia Episcopal Colombiana y que a su vez aplica la Arquidiócesis de Ibagué en el territorio.

Política de reconciliación y paz en el Tolima, equidad en el acceso a los derechos, reforma agraria integral, educación con calidad y cobertura, educación de democracia, construcción de país desde la diversidad, decesentralización económica y procesos de desarrollo social inclusivos, son algunos de los derroteros o líneas gruesas de trabajo que desarrolla la Comisión.

“Uno de los pilares que tenemos para el 2019, siguiendo estas líneas de trabajo, es hacer un seguimiento al acuerdo de paz en el Tolima, como también a la política pública de derechos humanos reconciliación y paz”, advierte Jaime Bernal González, miembro de la Comisión y directivo de Concern Universal Colombia.

Otro de los compromisos de la Comisión Regional de Conciliación y Paz del Tolima tiene que ver con el énfasis de Educación para la paz, materia indispensable en la construcción de la tan anhelada reconciliación y en la comprensión de los procesos históricos.

“Vamos a apoyar la Cátedra de Paz en un marco de reconciliación, creemos que antes que la paz nosotros debemos reconciliarnos, es ahí donde en las escuelas y colegios queremos adelantar procesos interesantes”, asegura Bernal González.

Los miembros de la Comisión son conscientes de la importancia que tiene el fortalecimiento de la economía en la región, que permita la reconstrucción del tejido social y acompañe los procesos de reconciliación y paz.

La Comisión, que lleva trabajando tres años, y que volverá a reunirse al final del presente mes, busca a través de la Comisión de Conciliación Nacional, la visibilización de los procesos adelantados en el territorio, los que adelanta la Arquidiócesis de Ibagué, las Diócesis del Líbano y Honda y la Pastoral Social.

Finalmente el organismo aspira, antes de cerrarse este año el proceso electoral, realizar conversatorios con los candidatos a la gobernación del departamento y a la alcaldía de Ibagué, que giren alrededor del tema de la reconciliación y la paz.


Redacción Paz Estéreo