Álvaro Eduardo Hernández Salazar es un tolimense, nacido en Santa Isabel, que lleva 18 años viviendo en España y que este domingo 26 de mayo presenta su nombre a consideración de los madrileños para ser Alcalde de la capital española.
Este tolimense, comunicador social y periodista, que pasara por las redacciones de diarios tan importantes en Colombia como EL TIEMPO y EL PAÍS, y que hiciera parte del grupo de comunicaciones del Fondo para la Reconstrucción del Eje Cafetero, Forec, se convirtió en el primer ciudadano, no nacido en territorio español, en postularse a la Alcaldía de Madrid.
Cuando decidió a finales de la década del 90 irse del país, que acababa de vivir la muerte de Jaime Garzón, un mazazo en la conciencia nacional y a la libertad de expresión, Álvaro Eduardo Hernández Salazar sólo aspiraba a rehacer su vida y a seguir buscando, a través del periodismo, tender puentes para seguir haciendo lo que más le gustaba, comunicar.
Y en ese dejarse llevar por la vida y estar atento a los signos que la ciudad pone en juego para descifrar, Álvaro Eduardo leyó bien las nuevas condiciones que el mundo, y especialmente la capital española le planteaba en aquel momento.
Por eso se puso del lado de los migrantes, que como él, intentaban encontrar una nueva forma de vida que les permitiera integrarse y ser aceptados, en una sociedad que pese a los esfuerzos sigue negando el poder de la diversidad y los beneficios de la buena convivencia.
Fue así como después de golpear varias puertas y de ejercer varios oficios, propios de los migrantes recién llegados, la cadena Antena le abrió un espacio radial que él denominó Todas las noticias Latinas y que ya lleva 15 años al aire.
Desde allí, Álvaro Eduardo ha logrado construir puentes con la comunidad latinoamericana residente en Madrid, que acuden a su programa todos los sábados para asesorarse jurídicamente en los procesos de búsqueda de su ciudadanía, trabajo y adaptación a una nueva vida.
Pero llegar hasta este punto no ha sido fácil y mucho menos una casualidad. Álvaro Eduardo siempre ha pensado la política como un ejercicio del servicio, de pensar al otro, de trabajar por el bienestar común, algo de lo que carece el ejercicio de la política no solo en Colombia sino en el resto del mundo.
Tal vez su mejor ejemplo fue el trabajo comunitario que ejerció su madre durante muchos años en el barrio La Francia de Ibagué, integrando las Juntas de Acción Comunal, trabajando con la comunidad para satisfacer las necesidades más básicas, como recreación y deportes, mejores servicio públicos y expandir una conciencia de que lo público es asunto de todos.
“La idea real de la política no es ese juego de intereses, no es un puñado de estrategas que trabajan para tu campaña y te dicen que tienes que decir, cómo y cuándo, inclusive la forma de escenificar eso, no, eso vacía la política de contenido y de convicciones”, asegura Álvaro Eduardo.
El candidato a regir los destinos del Ayuntamiento de Madrid por el Partido Castellano Tierra Comunera, señala que, en su vida la política siempre fue una gran motivación, como lo fue también el periodismo, la diferencia, advierte, es que nunca ejerció la política desde la trinchera de los partidos.
“Yo he hecho política toda mi vida, desde que me acuerdo, desde que estaba pequeñito, siempre quise ser periodista y la política siempre fue la motivación de mi vida, la diferencia es que yo no he hecho política partidista y el problema es que las grandes masas, la gente en general y la opinión pública, asocian la política con el ejercicio partidista y resulta que eso no es así, nosotros hacemos política todo el tiempo, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, aun no siendo conscientes de ello”, comenta Álvaro Eduardo.
Y en ese sentido lo que Álvaro Eduardo Hernández Salazar ha intentado hacer siempre a lo largo de su trayectoria, es pedagogía sobre la importancia de la política, al considerarla no como el problema, sino, la solución.
“Estamos en un momento en que la política está huérfana de identidad, creo que ese desorden, en esa reconfiguración de la política a nivel mundial, nos está dejando en manos de unos extremismos que utilizan herramientas muy fáciles de vender, es decir; responsabilizar al otro, al que viene de afuera de ser el causante de tus problemas, es muy nocivo”, advierte el candidato.
Y es en esta coyuntura en la que el trabajo de ciudadanos como Álvaro Eduardo, en la medida en que sigan siendo visibles y se fortalezcan podrán edificar la confianza y credibilidad, que les permita convertirse en voceros de los que no tienen voz.
El papel que los latinoamericanos jugarán en la toma de decisiones de la capital española, como ya lo tienen en países como Estados Unidos, será clave en el corto y el mediano palazo en España, y en este caso en Madrid.
En ese camino está la propuesta de Álvaro Eduardo y su colectivo Tierra Comunera, de trabajar la descentralización administrativa, de empoderar a las comunidades en la toma de decisiones de sus localidades, de su ciudad, de trabajar por el respeto a la diversidad y mejorar la convivencia en un mundo en el que las fronteras se desvanecen.
Su búsqueda, que no es fácil, porque aunque se desvanecen las fronteras también se exacerban los nacionalismos, está en posicionarse y ganar protagonismo en la vida política de la ciudad, que les permita, con representatividad, integrarse políticamente en la vida de la ciudad y de la Nación. En ese camino está Álvaro Eduardo Hernández Salazar, un colombiano que no abandonó nunca sus talentos y hoy quiere ponerlos al servicio de la capital española.
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Redacción Paz Estéreo
