Expresando: “En estas últimas semanas han llegado dramáticas noticias de naufragios de barcas cargadas de migrantes en aguas del Mediterráneo. Expreso mi dolor ante estas tragedias y hago llegar a los desaparecidos y a sus familias mi recuerdo y mi oración”.
Del mismo modo, hizó “un sincero llamado a la comunidad internacional para que actúe con decisión y rapidez con el fin de evitar que tragedias similares puedan repetirse y para garantizar la seguridad y el respeto de los derechos y de la dignidad de todos”.
En las costas europeas se esta registrando una nueva oleada de barcas llenas de migrantes procedentes del norte de áfrica, especialmente de Libia, quienes el buen tiempo del verano en el hemisferio norte para tratar de cruzar el Mediterráneo.
Una lamentable noticia sucedió el pasado martes 17 de julio, una pequeña embarcación de 9 metros de eslora con 150 personas a bordo naufragó frente a las costas libias. A pesar de las labores de rescate fallecieron una mujer y un niño.
Debido a este y otros similares que se han repetido en las últimas semanas. La Conferencia Episcopal Italiana emitió un comunicado en el que pidió un mayor esfuerzo para salvar y acoger a migrantes y refugiados.
En el comunicado los Obispos afirmarón:“Nos sentimos responsables de este ejército de pobres, de víctimas de la guerra y del hambre, de desiertos y de torturas. Es la historia sufrida por hombres, mujeres y niños que nos reclama un ejercicio de solidaridad, de justicia y de paz”.
Redacción: Paz Estéreo