El Sínodo no es un parlamento: papa en la Santa Misa de Apertura de la Asamblea del Sínodo

Captura de pantalla. Eucaristía de Apertura del Sínodo. 4 de octubre/2023

Este miércoles 4 de octubre en la Plaza de San Pedro, el santo recordó qué es el Sínodo y qué espera de esta reunión particular.

Con la Santa Misa inició oficialmente la 16 Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que constituye la fase Universal del “Sínodo para la Sinodalidad” . Del 4 al 29 de octubre estarán reunidos representantes del Pueblo de Dios en Roma.

Durante su homilía el papa Francisco recordó qué es el Sínodo y lo que se espera de esta reunión donde el protagonista es el Espíritu Santo. “No estamos aquí para celebrar una reunión parlamentaria o plan de reformas, el Sínodo no es un parlamento, el protagonista es el Espíritu Santo”, enfatizó el papa.

El evangelio proclamado de san Mateo 11,25-30, en el que Jesús bendice al Padre, le da gracias porque le revela su sabiduría a los sencillos, sirvió de referencia, para recordar el sentido de esta asamblea: “Estamos aquí para caminar juntos con Jesús que bendice al Padre, y acompaña a los que sufren”.

Mirada que bendice

El pontífice recordó que este evangelio está precedido por un momento difícil de la misión de Jesús, que podría definirse como “desolación pastoral”. “Juan Bautista dudaba que Él fuera realmente el Mesías, muchas ciudades por las que había pasado, a pesar de los milagros no se había convertido; mucha gente la acusaba de ser un glotón y borracho, mientras poco antes se lamentaba del Bautista por ser muy austero“.

De esta manera el santo padre indicó que, ante los distintos problemas en el mundo, la Iglesia  está llamada a bendecir y acoger las distintas realidades de sufrimiento. “La mirada de bendición del Jesús nos invita a ser una una Iglesia que no afronta los desafíos y problemas de hoy con espíritu de división y conflicto, sino que por el contrario vuelve los ojos a Dios, que es comunión y  con asombro y humildad lo bendice y adora,  y lo reconociéndolo como único Señor“.

“La única razón de nuestra existencia es llevarlo a él al mundo”

Recordando la esencia fundamental de la Iglesia, del Pueblo de Dios, el papa advirtió que el sínodo no está para “quedar bien a los ojos del mundo”. Así lo expresó con vehemencia: “No queremos glorias terrenas, No queremos quedar bien a los ojos del mundo, sino llegar a el con el consuelo del Evangelio para testimoniar mejor y a todos con el amor infinito de Dios”.

El papa también recordó que la principal tarea del Sínodo es “Volver a poner a Dios en el centro de nuestra mirada”, así como lo hizo Jesús, para ser una iglesia que acoge. “Para ser una Iglesia que ve a la humanidad con misericordia, una Iglesia unida y fraterna, o al menos que trata serlo”.

¿Cómo quiere Jesús a su Iglesia?

El papa francisco continuó relatando cómo quiere Jesús a la Iglesia, su esposa. Una Iglesia “que escucha , unida y dialoga, una Iglesia que bendice y anima, que ayuda a quienes buscan al Señor, que sacude saludablemente a los indiferentes, que pone en marcha itinerarios para instruir a las personas en la belleza de la fe”.

Además añadió que Jesús quiere una iglesia sin divisiones y arriesgada. “Una iglesia que tiene a Dios en el centro y por consiguiente no crea divisiones internas ni externamente; una iglesia que arriesga con Jesús”.

Mirada que acoge

La expresión de Jesús en el evangelio “Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados, y yo los aliviaré” (Mt 11, 28), indicó el papa que “nos invita a ser una iglesia que acoge, no con las puertas cerradas”.

Además el pontífice recordó a san Pablo VI, animando a ser una “Una Iglesia del coloquio”; añadiendo que estamos llamados a ser “una iglesia del yugo suave, que no impone cargas”, pero que acoge a todos. Por eso la Iglesia debe repetir, como Jesús “vengan todos los que están afligidos y agobiados, vengan ustedes que están extraviados en el camino o que se sienten alejados, vengan ustedes que le han cerrado la puerta a al esperanza, la iglesia está aquí para ustedes, la Iglesia que de las puertas abiertas a todos, a todos, a todos“, indicó el Papa.

Las tentaciones peligrosas

El papa Francisco advirtió la mirada de Jesús nos invita a evitar tentaciones peligrosas en la Iglesia. “Ser Iglesia rígida, una aduana que se acoraza contra el mundo y mira el pasado; iglesia tibia que se rinde antes las modas del mundo, una iglesia cansada, replegada en sí misma“.

También el papa recordó que en el libro del apocalipsis el Señor indica que “está a la puerta y llama”, pero muchas veces, “El Señor toca a la puerta desde adentro de la Iglesia, para que dejemos salir al Señor con la iglesia a proclamar su evangelio”.

Recordando a san Francisco de Asís

Hoy 4 de octubre es la celebración litúrgica de san Francisco de Asís, el papa refirió al santo expresando: “Caminemos juntos, alegres y vigorosos, siguiendo las huellas de San Francisco de Asís, el santo de la pobreza y la paz, el loco de Dios, que, llevó en su cuerpo las llagas de Jesús y se despojó de todo“.

Además recordó el episodio en que el Señor le pide a Francisco que repare su Iglesia, recordando que aún necesita ser reparada. “El sínodo sirve para recordarnos que nuestra iglesia siempre tiene necesidad de purificación, de ser reparada, porque todos nosotros somos un pueblo de pecadores y perdonados“.

El papa puso como ejemplo a san Francisco en su acción valerosa antes las dificultades de su tiempo, e invitó, especialmente a los miembros de la asamblea a emplear como este santo, las armas del evangelio. “Francisco solo abrazó las armas del evangelio, es decir la humildad y unidad, la oración y la caridad, hagamos lo mismo nosotros”

Finalmente el papa Francisco recordó nuevamente que el Sínodo no es un parlamento polarizado: “No es una reunión política, no es un parlamento, sino una convocación del Espíritu, no es un parlamento polarizado, sino un lugar de gracia y comunión”.

La homilía concluyó con una invitación a dejar que el Espíritu Santo haga su obra y actúe en medio de la Iglesia:  “Abrámonos al  Espíritu Santo e invoquémoslo, Él es el protagonista, dejemos que Él sea el protagonista del Sínodo y con Él caminemos con confianza y alegría”.


Redacción Paz Estéreo