Monseñor Gustavo Vásquez nos invita a vivir la Cuaresma como un tiempo de espiritualidad de encuentro con Dios con nosotros mismos y los más necesitados.
La Cuaresma es tiempo que nos prepara para la fiesta de la pascua, el cuerpo de Cristo sobre la muerte hacia su resurrección, son cuarenta días de preparación para recibir los días santos que se celebran en el sagrado triduo pascual, donde se fortalece la vida por medio de la oración.
La oración es un medio para encontrarnos con Dios, crecer en la espiritualidad y fortalecernos para luchar contra las tentaciones.
Monseñor Gustavo Vásquez nos invita a poner en práctica la caridad, la limosna y compartir entre lo mucho o poco que tengamos con aquel que lo necesita, abriendo nuestro corazón a las necesidades del prójimo.
El vicario de la Arquidiócesis de Ibagué exhorto a dejar que “no solo sean las instituciones las que ayuden al prójimo, sino que por el contrario sea la misma comunidad la que de una mano de apoyo a los que necesitan”.
Finalmente, recordó que la invitación en la Cuaresma es vivir el ayuno como un acto que permita solidarizarnos con aquellos que pasan hambre, templar el espirito y reconocer que debemos perfeccionarnos y purificarnos cada día que el señor nos regala. La cuaresma es un tiempo de espiritualidad de encuentro con Dios con nosotros mismos y los más necesitados.
Redacción: Paz Estéreo