Monseñor Orlando Roa Barbosa, de nuevo en casa

Foto: CEC

En la Catedral Metropolitana de Ibagué, se llevó a cabo el acto protocolario de bienvenida a Monseñor Orlando Roa Barbosa.

Ante importantes miembros del clero tolimense, de las autoridades civiles y militares del departamento y la capital tolimense, Monseñor Orlando Roa Barbosa tomó la promesa de fe y fidelidad como nuevo Arzobispo de la Arquidiócesis de Ibagué.

En su discurso, amplio e incluyente, en el que se mostró profundamente emocionado y agradecido, Monseñor Orlando Roa Barbosa agradeció de manera generosa y humilde la presencia en su vida consagrada de hombres de fe como Monseñor Juan Francisco Sarasti, Arzobispo Emérito de Cali, Monseñor Flavio Calle Zapata, Arzobispo Emérito de Ibagué y con Monseñor Miguel Fernando González Mariño, hasta hoy Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Ibagué.

“A ustedes pido su bendición, y por favor, no me suelten en sus oraciones, gracias por todo lo que han hecho y pueden seguir haciendo por nuestra querida iglesia”, dijo visiblemente emocionado el nuevo Arzobispo de Ibagué.

Agradecido con Dios por el compromiso que implica para su vida sacerdotal este nuevo reto al frente de la Arquidiócesis de Ibagué, Monseñor Roa Barbosa, no olvido en saludar también, con gratitud y un dejo de nostalgia, a sus compañeros de presbiterio Monseñor Hernán Gallo y Monseñor Gustavo Vásquez Montoya.

“A todos los recuerdo con especial afecto, por la historia que ha unido nuestras vidas por la gracias de Dios, son muchos los momentos que hemos vivido, como seminaristas, como hermanos de un mismo presbiterio y como generosos colaboradores mientras fui Obispo Auxiliar, el Señor nos fue llevando para que ahora, por su infinita voluntad, nos volvamos a encontrar en otra etapa importante de mi vida”, señaló Monseñor Roa Barbosa.

En sus palabras de agradecimiento Monseñor Orlando Roa Barbosa también manifestó sentirse perplejo ante los designios de Dios, por la magnitud del compromiso que asume en esta nueva etapa de su vida consagrada. “Pero si el señor da la tarea, también da la gracias para realizarla en su nombre”, dijo Monseñor esbozando una sonrisa.

En su ya conocida posición de humildad, que ha caracterizado su vida sacerdotal y de servicio, Monseñor Orlando Roa Barbosa pidió a los fieles y a sus compañeros de presbiterio, comprensión.

“Les pido comprensión, por favor, no me exijan la santidad de mis antecesores, porque ustedes saben que no la tengo, y esto no es humildad, es verdad, les pido obediencia sincera, y sobre todo, lealtad con el Obispo que el Señor ha puesto al frente de los designios de nuestra querida iglesia particular de Ibagué, el más indigno del episcopado colombiano, pero perplejo ante los designios de divinos en mi vida”, señaló Monseñor.

El nuevo Arzobispo de Ibagué aseguró estar dispuesto a responder al llamado divino con espíritu, entrega, dedicación y ánimo generoso. En su corto pero claro discurso de toma de fe y fidelidad, Roa Barbosa pido la colaboración y entrega total que siempre los ha caracterizado, para que entre todos continuemos la construcción del Reino de Dios, en medio del pueblo tolimense.

A los miembros de la iglesia, que tienen responsabilidades en la vida diocesana, como a los miembros de la curia diocesana, a los delegados de pastoral, a los vicarios foráneos, al equipo de formadores en el Seminario Mayor, al Colegio de Consultores, a quienes han hecho parte del Concejo Presbiteral, al Tribunal Eclesiástico, y a quienes tienen responsabilidades dentro de la vida de la iglesia, a las religiosas, religiosos y consagrados, los invitó a trabajar con entrega, compromiso y creatividad, especialmente en los tiempos que corren, llenos de dificultades y nuevos retos, en los planes de pastoral trazados por la arquidiócesis.

Sobre los movimientos apostólicos, Monseñor Orlando Roa Barbosa, señaló que son una riqueza que la iglesia debe cuidar, mantener y acompañar muy de cerca en la vida diocesana. Sobre su trabajo e importancia, advirtió que, contarán con el apoyo incondicional del Obispo, siempre y cuando se mantengan en actitud de oración, de comunión, con el Papa, el Obispo, sus sacerdotes y su párroco. “La comunión entre nosotros, es signo de la comunión que cada uno mantiene con el mismo Dios en todo su misterio”, aseguró el nuevo Obispo.

En cuanto a los líderes político, representados en la Gobernación del Tolima, la Alcaldía de

Ibagué, la duma departamental y el concejo de la ciudad, Monseñor Orlando Roa Barbosa les bendijo y aseguró que pueden contar con sus oraciones, para que entre todos se busque el bien común de la comunidad. “El todo poderosos los llene de sabiduría para gobernar el departamento y la ciudad, siempre en busca de bien común en vez de intereses particulares o de grupo”, dijo Monseñor.

A las autoridades militares y de Policía que sirven en la región, les aseguró que siempre están y estarán en las oraciones de Obispo para que Dios los libre de todo mal y los proteja. Asimismo envió un mensaje de solidaridad y su oración para todos los miembros del personal de salud que, en estos tiempos de pandemia, entregan su mejor esfuerzo por las comunidades.

A los gremios y empresarios, a los agricultores, a los ciudadanos en general, a la sociedad civil organizada, que trabaja a diario por el Tolima, también envió un mensaje de reconocimiento por sus labores, tan importantes para mantener la región en marcha. “Mantengan firme el espíritu de sacrificio, de generosidad y de servicio que les caracteriza”, dijo Monseñor.

Sobre las denominaciones religiosas de origen cristiano y protestante, que coexisten con la iglesia católica en la región, el nuevo Arzobispo de Ibagué también se refirió enviando un mensaje de cordialidad y de comunión.

“Los invito a trabajar y a no bajar la guardia en la intensidad de sus oraciones, en pro de construir una sociedad para Dios y en nombre de Dios, sin intereses humanos que nos alejen de la gracia, hay que pedirle a Dios que nos ayude para que se aleje el pecado de esta generación, que se alejen todas la manifestaciones de satanismo que van contaminando a nuestros niños, jóvenes y adultos, el pecado es la peor de las pandemias que tenemos que enfrentar, porque contagia con impresionante facilidad y si no se le pone remedio nos lleva al abismo del infierno, de la perdición y de la condenación eterna”, sentenció Monseñor Roa Barbosa.

Finalmente, el nuevo Arzobispo de Ibagué, agradeciendo y bendiciendo la presencia de su familia en un momento crucial de su vida consagrada, terminó sus palabras de bienvenida en una oración sentida y humilde.

“Padre Santo todopoderoso, hoy una vez más pongo en tus manos esta querida Arquidiócesis de Ibagué, que me pides cogobernar como padre y pastor, como amigo, hermano y Obispo, pido la sabiduría asistente de tu trono, las virtudes que tanto necesito, que yo sea un hombre de fe, esperanza y caridad, humilde, obediente, lleno de pureza, de castidad y sencillez, de transparencia, mansedumbre, bondad, fortaleza, piedad y temor de Dios…Oh Dios… dame sabiduría, envíamela desde el cielo, y desde el trono de tu divina majestad mándala, que descienda, para que esté siempre conmigo, y trabaje conmigo, para que conozca lo que es aceptable a ti, ella sabe y entiende todas las cosas, y me guiará sabiamente en mis trabajos, y me preservará con su poder…Padre celestial ayúdame a mantenerme en permanente comunión contigo, con tu amado hijo, nuestro señor Jesucristo, salvador y redentor y con el Espíritu Santo, consolador, vivificador y santificador… la siempre Virgen María, Madre de Dios y madre nuestra en su advocación de la Inmaculada Concepción, me cubra con su manto de protección… San José me acompañe con su intercesión amorosa… San Miguel Arcángel y los santos ángeles custodios caminen siempre con nosotros. Señor, en tu nombre echaré las redes en esta porción de tu pueblo, que peregrina en una buena parte del departamento del Tolima, en tu nombre, oh Cristo, quiero servir a tu evangelio para la esperanza de esta querida iglesia particular de Ibagué. Señor, camina conmigo”.


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