El Consejo Mundial de Iglesias y las Iglesias de Oriente Medio se unen a las reacciones del mundo entero, por la decisión del presidente turco, de convertir en Mezquita la basílica ortodoxa de Santa Sofía en Estambul.
Lisa Zengarini-Ciudad del Vaticano
Continúan las reacciones en todo el mundo ante la decisión del gobierno turco de convertir en Mezquita el complejo monumental de Santa Sofía en Estambul. Esta decisión fue anunciada el 10 de julio por el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, horas después del fallo del Tribunal Supremo que anuló el decreto de 1934 del "Padre de la Patria" Mustafá Kemal Atatürk que había transformado en museo la antigua basílica bizantina, que se había convertido en mezquita tras la conquista otomana de Constantinopla.
Después de las fuertes palabras de los Patriarcas de Moscú Kirill y Constantinopla Bartolomé, a las que se añadió el domingo la voz del Papa Francisco en el Ángelus, el Secretario General ad interim del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), el Reverendo Ioan Sauca, en nombre de todas sus 350 iglesias miembros, expresó en un comunicado también "dolor y desconcierto" por la iniciativa.
"Con la conversión de Santa Sofía en una mezquita han convertido una señal positiva de la apertura de Turquía en una de exclusión y división", dijo Sauca. Según el CMI, la reconversión de este "lugar simbólico" "creará inevitablemente incertidumbre, sospecha y desconfianza", frustrando todos los esfuerzos realizados también por las iglesias cristianas para promover el diálogo y la colaboración entre las diferentes religiones. El temor del Consejo Mundial de Iglesias es también que pueda "alentar las ambiciones de otros grupos que quieren cambiar el statu quo y fomentar nuevas tensiones entre las comunidades religiosas".
El Consejo de Iglesias de Oriente Medio (MECC), que es miembro del CMI, expresa en el comunicado, por su parte, de "un ataque a la libertad y la coexistencia religiosa". A través de su Secretario General, el libanés Souraya Bechealany, pide por lo tanto a la ONU y a la Liga Árabe que apelen formalmente contra la decisión, también para preservar – se lee - el "simbolismo histórico representado por la Iglesia de Santa Sofía".
Según el MECC, el aspecto "más peligroso" de la decisión es que llega en un momento crucial en el camino del diálogo iniciado por cristianos y musulmanes para promover la coexistencia pacífica contra todo extremismo y que culminó con la firma del histórico Documento de Abu Dhabi sobre la Hermandad Humana, firmado el 4 de febrero de 2019 por el Papa Francisco y el Gran Imán de Al Azhar Ahmed Al-Tayeb.
Tomado de portal Vatican News