Arquidiócesis de Ibagué acompaña al nuevo obispo de la Diócesis de Neiva, Monseñor Marco Antonio Merchán

Delegación Arquidiócesis de Ibagué en Neiva

Este jueves 15 de junio, se llevó a cabo la ceremonia de Posesión Canónica de Monseñor Marco Antonio Merchán quien asume el encargo de pastorear la Diócesis de Neiva. Con la presencia de varios obispos, sacerdotes y fieles se vivió la celebración eucarística en la Catedral La Inmaculada Concepción de Neiva.

En la ceremonia estuvo presente una delegación de sacerdotes de la Arquidiócesis de Ibagué, en cabeza de nuestro arzobispo, Monseñor Orlando Roa Barbosa, quien inició presidiendo la celebración eucarística. Cabe recordar que la Diócesis de Neiva es sufragánea de la Arquidiócesis de Ibagué.

En el mes de abril se dio a conocer el nombramiento que hacía el Papa Francisco a Monseñor Merchán, quien se desempeñaba como obispo de la Diócesis de Vélez, Santander.

Monseñor Marco Antonio Merchán

Monseñor nació el 28 de abril de 1970 en el municipio de Monguí (Boyacá), el obispo Merchán Ladino completó su formación filosófica y teológica en el Seminario Conciliar de la Arquidiócesis de Tunja. Fue ordenado sacerdote en 1996 y consiguió la Licenciatura en Filosofía y Ciencias Religiosas ante la Universidad Santo Tomás de Bogotá. Posteriormente, obtuvo el Doctorado en Derecho Canónico en la Pontificia Universidad Lateranense de Roma.

Durante su ministerio, monseñor Merchán Ladino ha desempeñado diversos cargos en la Diócesis de Duitama-Sogamoso, entre ellos, el de Vicario parroquial en Nuestra Señora de Chiquinquirá en Sogamoso, Capellán y Profesor en el “Instituto Integrado Guillermo León Valencia” y Párroco de Nuestra Señora del Rosario en Sogamoso. También ha sido Vicario General de la Diócesis de Duitama-Sogamoso y Párroco en la Catedral San Lorenzo de Duitama.

En 2016, el Papa Francisco lo nombró Obispo de Vélez, cargo que ha ocupado hasta su nombramiento como Obispo de Neiva.  “Como Jeremías soy un hombre tímido, confieso mi debilidad… cómo me gustaría ser más santo, más sabio, más coherente, más prudente. Con humildad reconozco que esto es lo que hay, pero esto que hay que -que es nada-, lo pongo en las manos de Dios, que sirve como humilde instrumento de salvación”, indicó monseñor Merchán al iniciar la homilía.

Con alegría y gratitud nos unimos a esta celebración pidiendo al Buen Dios le conceda su gracia para llevar a cabo su tarea de pastorear el rebaño que Él mismo le ha encargado.


Redacción Paz Estéreo