Crimen de Garzón: 20 años de pobres resultados

Foto: Cortesía

Cualquiera supondría que lo que más recuerda Marisol Garzón de su hermano es su sonora carcajada o su sonrisa de dientes desordenados, pero no, lo que más recuerda, sin duda, es su mano sosteniéndola, “él era dos años mayor que yo y siempre me llevaba de la mano, como mi mamita nos enseñó”.

Por: Olga Patricia Rendón / Sergio Andrés Correa

EL COLOMBIANO

También llega a su pensamiento la mirada crítica que Jaime Garzón tenía, nunca tragaba entero y se atrevía a decirlo públicamente: “La gente dice que Jaime era un humorista y yo insisto en que era un pedagogo, que entendió, como ninguno, el contexto en el que vivía el país, y pudo prever muchas de las cosas que ocurrirían después”.

Ya han pasado 20 años desde la madrugada en la que el periodista fue asesinado mientras se desplazaba a la emisora en la que trabajaba en Bogotá.

“Me van a matar, hasta mañana tengo plazo de vida”, le había dicho dos días antes a su maquilladora, al sentirse asediado por los paramilitares. Y así ocurrió.

¿Impunidad?

“En Colombia, la pregunta es: ¿quién nos va a matar?, ¿los guerrilleros, los paramilitares, los narcos o los políticos?”, dijo varias veces Garzón en los programas de televisión en los que se hizo famoso, y esa pregunta es la que ha rondado durante dos décadas en los escritorios de la Fiscalía: ¿Quién mató a Jaime Garzón?

En sendos expedientes de la justicia puede conocerse que José Miguel Narváez, exdirector del DAS, condenado a 26 años de prisión en primera y segunda instancia, le sugirió a Carlos Castaño que lo matara, y se acusa al coronel (r)Jorge Eliécer Plazas Acevedo, hoy en juicio, de haber entregado información a los paramilitares sobre los movimientos del comunicador, pero muchos detalles no se han resuelto.

Claudia Julieta Duque, la periodista que más ha investigado el caso de Garzón, cuyo trabajo le costó torturas del DAS, asegura que aún no se ha esclarecido la motivación de los asesinos ni quién estuvo por encima de Narváez para determinar el crimen.

Y según el abogado de la familia Garzón, Sebastián Escobar, “el rol de Narváez en el homicidio de Jaime Garzón fue servir de intermediario entre algunos sectores de la Fuerza Pública, particularmente del Ejército, y los grupos paramilitares que fueron los que finalmente ejecutaron este crimen, y todavía existen inquietudes y dudas de quiénes son esas personas de altos sectores del Ejército que estuvieron detrás”.

Tampoco se ha avanzado en establecer por qué y bajo cuáles órdenes la Fiscalía enredó el caso, acusando y encarcelando a dos personas que resultaron inocentes (Juan Pablo Ortiz Agudelo Edilberto Antonio Sierra Ayala) y fabricando testigos y pruebas que desviaron la investigación.

Duque recuerda que el Juez Séptimo Especializado de Bogotá, en marzo de 2004, ordenó investigar a los diez funcionarios del DAS implicados en el entramado corrupto que facilitó la desviación de las pesquisas; sin embargo, solo hasta el 2014 la Fiscalía abrió indagación en contra de Emiro Rojas Granados, pero aún no lo ha vinculado al proceso.

Además, la entonces Dirección Nacional de Análisis y Contexto de la Fiscalía ordenó en 2014 abrir investigación en contra de los funcionarios que desviaron el caso, pero hasta ahora no ha ocurrido nada. “Terminó siendo un mensaje político y no una orden judicial”, anota Duque.

Y en 2012 la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Medellín, en la formulación de cargos contra Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “don Berna”, pidió a la Fiscalía investigar a los generales retirados Jorge Enrique Mora Rangel y Harold Bedoya (Q.E.P.D) por este crimen, pero no fueron llamados.

Al final de cuentas, hay solo dos personas condenadas, por un crimen que cometieron muchas, afirman Escobar y Duque.

¿Delito de lesa humanidad?

El 27 de julio de 2016 un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía General de la Nación declaró como delito de lesa humanidad el homicidio de Garzón, con lo cual la acción penal no prescribiría pasados los 20 años. Sin embargo, es una decisión con la que no han estado de acuerdo ni el juez ni el magistrado que condenaron a Narváez en primera y segunda instancia, ambos consideraron que el ente acusador no pudo comprobar que el crimen esté relacionado con una política o un plan de exterminio en contra de un grupo.

Para el abogado Escobar el asunto es muy claro: “Este no fue un hecho aislado, a Jaime lo mataron por su talante de periodista crítico, pero también por su labor humanitaria con la Gobernación de Cundinamarca, particularmente, apoyando algunas labores para la liberación de secuestrados de la vía al Llano por parte de las Farc y atentaron en su contra debido a la naturaleza de esa actividad y de lo que representaba él mismo”.

E insiste en que el modus operandi de este asesinato coincide con el de otros defensores de derechos humanos que se dieron por esos años, como los de Jesús María Valle, Elsa Alvarado, Mario Calderón Eduardo Umaña.

“Participación de la inteligencia militar, unas personas que entregaban la información a las Autodefensas para que ejecutaran los crímenes a través de la banda ‘La Terraza’, que era el brazo armado para este tipo de magnicidios”, relata el apoderado de la familia.

Con la decisión de los jueces, los términos para los procesos contra Narváez y contra el coronel (r) Plazas Acevedo, prescribirán 10 años después de que hubieran sido llamados a juicio, es decir, contra Narváez la prescripción se dará el 21 de agosto de 2021 y contra Plazas Acevedo en julio de 2024, aunque para este último están congelados los términos mientras la Jurisdicción Especial para la Paz decide acerca de su sometimiento.

Para los demás implicados que no han sido llamados a juicio, la investigación no precluye, ya que se aplica la declaratoria de delito de lesa humanidad de la Fiscalía.

Frente al lento andar de la justicia colombiana, por no llamarlo impunidad, Marisol Garzón se encomienda a la justicia divina, aunque sigue clamando porque también la haya en la tierra.

Sabe que los responsables tendrán que pagar, porque ella perdió un hermano, pero “Colombia perdió la posibilidad de mirarse al espejo, de leerse de una forma crítica. Colombia perdió una voz inteligente y lúcida que en medio de risas nos mostró cómo éramos” .

CONTEXTO DE LA NOTICIA

PROTAGONISTA JAIME: EL PEDAGOGO

Jaime Garzón
Periodista (1960-1999)

Era abogado, periodista, humorista y mediador de paz. Jugó un papel importante en las negociaciones de paz de los 90 y en la liberación de secuestrados a manos de las Farc. Se hizo famoso por interpretar personajes de ficción que con humor explicaban las coyunturas políticas, como Heriberto de la Calle. A las 5:45 a.m. del 13 de abril de 1999, a sus 39 años, fue acribillado por dos sicarios en Bogotá, cuando se dirigía en su camioneta a los estudios de Radionet, donde laboraba.

PARÉNTESIS CÓMO SE DECLARA LA LESA HUMANIDAD

El Estatuto de Roma, acuerdo internacional que da origen a la Corte Penal Internacional, define los crímenes de lesa humanidad como aquellos “que son parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil”, y les otorga imprescriptibilidad, es decir, que pueden ser investigados sin vencimiento de términos. En Colombia, la Corte Suprema de Justicia ha determinado que las características que configuran el concepto de lesa humanidad deben ser constatados en cada proceso en concreto para evitar generalizaciones.

RESPONSABLES Y PRESUNTOS IMPLICADOS EN EL CASO GARZÓN

CARLOS CASTAÑO GIL

Exjefe paramilitar

Fue condenado el 10 de marzo de 2004, por un juzgado especializado, a pagar 38 años de prisión como coautor del delito de homicidio agravado por la muerte de Garzón. El juez consideró las amenazas de Castaño contra el periodista como una de las principales pruebas para declararlo culpable y se comprobó que, incluso, había previamente contratado a un sicario que no fue capaz de cometer el delito. Castaño habría sido asesinado el 16 de abril de 2004 a manos de alias “Monoleche”, escolta de su hermano Vicente.

RITO ALEJO DEL RÍO ROJAS

General (r) del Ejército

Vinculado a la investigación por el crimen en 2015, luego de que el exjefe paramilitar Diego Fernando Murillo, “don Berna”, lo señalara como persona cercana a Carlos Castaño y afirmara que junto a él, varios oficiales habrían participado en la planeación de la muerte de Garzón y la posterior estrategia de desviación de la investigación. Del Río fue escuchado en versión libre el 14 de marzo de 2016, pero no ha sido llamado a juicio. En 2017, mientras pagaba condena por otro delito, salió libre por someterse a la JEP.

SALVATORE MANCUSO GÓMEZ

Exjefe paramilitar

Declaró en noviembre de 2013 en el proceso contra el exdirectivo del DAS José Miguel Narváez, lo señaló de sugerir el asesinato de varios civiles y de reunirse con la banda “La Terraza” para ordenar la muerte de Garzón. No obstante, testigos del caso han declarado que él mismo habría participado del encuentro. Capturado desde 2006 como jefe de las autodefensas y extraditado a Estados Unidos en 2008, Mancuso fue escuchado en declaración por la Fiscalía en junio de 2018 mediante videoconferencia.

JOSÉ MIGUEL NARVÁEZ MARTÍNEZ

Ex subdirector del DAS

Fue condenado en primera instancia el 14 de agosto de 2018 como determinador del crimen, a purgar una pena de 30 años de prisión y pagar una multa de 500 salarios mínimos como indemnización a la familia del periodista. Se comprobó que fue él quien dio la idea a Carlos Castaño de cometer el asesinato y según el fallo, frecuentaba los campamentos paramilitares e impartía instrucciones a quienes allí estaban. El pasado 26 de julio de 2019, el Tribunal Superior de Bogotá rebajó su pena a 26 años.

JORGE ELIÉCER PLAZAS ACEVEDO

Coronel (r) del Ejército

A raíz del testimonio de alias “don Berna”, fue vinculado por la Fiscalía como coautor del delito de homicidio agravado en el caso de Garzón. El 5 de febrero de este año, el ente acusador pidió al juez séptimo de Bogotá emitir fallo condenatorio contra Plazas por el crimen. Actualmente, el coronel permanece en prisión condenado a 40 años por el homicidio de un comerciante y en su contra pesa también un proceso por su presunta relación con la masacre de Mapiripán. Espera ser admitido en la JEP.

MAURICIO SANTOYO VELASCO

General (r) de la Policía y exjefe de Seguridad de Álvaro Uribe.

Fue señalado por alias “don Berna” como presunto responsable de desviar la investigación judicial por el homicidio del periodista. Por ese motivo, fue escuchado por la Fiscalía en declaración el pasado 26 de junio. En su testimonio, negó haber tenido algún tipo de contacto con Garzón y tachó de “completamente falsas” las declaraciones de “don Berna”. Santoyo estuvo 9 años en prisión en EE. UU. por narcotráfico. Al cumplir su pena fue deportado y permanece con medida de aseguramiento.


Tomado del diario EL COLOMBIANO