Organismos de socorro trabajan en las labores de rescate y primeros auxilios.
El desbordamiento de la quebrada el Mono, ubicada en el municipio de Chaparral (Tolima) y que desemboca en el río Amoyá, dejó este jueves en la madrugada ocho personas desaparecidas y un número indeterminado de heridos.
Por el momento, se conoce que las autoridades y cuerpos de socorro se encuentran atendiendo la emergencia, que deja alrededor de 30 familias damnificadas, una familia desaparecida y al menos tres viviendas arrasadas, al igual que el puesto de salud que operaba en el lugar.
La oficina de Gestión del Riesgo señaló que las aguas arrastraron con numerosas viviendas de 3 veredas.
“La escuela de La Virginia quedó destruida, la iglesia quedó cubierta de lodo hasta la mitad y el puesto de salud resultó inundado”, dijeron las autoridades.
La oficina de Gestión del Riesgo de Chaparral señaló que los organismos de socorro y miembros del Batallón Caicedo buscan a los campesinos desaparecidos tras el desbordamiento.
El afluente bajó por esta zona montañosa y arrastró al menos 6 viviendas y la escuela.
Las personas que están desaparecidas son: Neftalí Quiñonez, 36 años; Julian Andrés Quiñonez, 10; Aurora Maria Montes, 34; Carmen Aponte, 39; dos mujeres con los nombres de Shirley Maria, 19, y Antonio, 39.
También es buscado un bebé de dos días de nacido.
La creciente se presentó en la madrugada de este jueves 26 de diciembre cuando los campesinos dormían en sus casas.“El agua se llevó hombres y mujeres adultas, y hasta un bebé de 2 días de nacido”, dijo un campesino que logró poner a salvo a su familia.
Luis Fernando Vélez, director de la Defensa Civil Tolima, envió personal pero el desplazamiento es complicado por las malas condiciones de la carretera pero uniformados del Batallón de Infantería 17 General José Domingo Caicedo apoyan a los afectados con rescate y traslado.
“Fue horrible, el río se nos vino encima y arrastró varias personas, Dios quiera que hayan podido salvarse”, afirmó un campesino de la vereda La Virginia que está a unas 3 horas de la zona urbana de Chaparral.
“La gente pide ayuda pues los desaparecidos son campesinos, son gente humilde que le tocó vivir esta tragedia”, señaló un habitante del cañón de las Hermosas.
Tomado del diario EL TIEMPO
