En 13 años, población de Colombia creció en 5,4 millones de personas

Foto: El Heraldo

Los datos definitivos del censo del 2018 confirman que somos menos de 50 millones de habitantes.

El Dane reveló ayer los datos oficiales del censo de población y vivienda realizado el año pasado, según el cual los habitantes del país somos 48’258.494 personas, una cifra superior a la estimada por la misma entidad en noviembre del 2018, pero inferior a la proyectada con base en el crecimiento de la población arrojado en 2005, cuando se realizó el último empadronamiento.

La cifra preliminar del Dane revelada a finales del año pasado indicaba que apenas éramos 45,5 millones de personas, 4,5 millones menos de las que indicaba el contador de población.

Es decir, que los nuevos datos revelados ayer por el Dane señalan que el descache en el número de habitantes que tiene el país no resultó tan monumental como en principio se llegó a pensar. Solo es un poco menos de 2 millones.

“Nunca fuimos 50 millones de habitantes en Colombia, la reciente encuesta de calidad de vida ya decía que no podíamos ser esa cantidad”, señaló Juan Daniel Oviedo, director del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), durante la presentación de los resultados, en la que hizo un recuento de los aciertos, fallas y dificultades que se presentaron durante la recolección de la información.

Agregó que el año pasado fueron censados cerca de 44,2 millones de colombianos y otros 4,1 millones fueron omitidos por diversas circunstancias, es decir, no pudieron ser contabilizados.

El resultado dado a conocer ayer muestra que frente al censo del 2005, en el que la población fue 42’888.592 personas, hubo un incremento de 5’369.902 habitantes, es decir, 12,5 por ciento.

En términos generales, no hubo mayores variaciones frente a los datos entregados el año pasado por la entidad, en cuanto a dónde está ubicada esa población, en qué condiciones vive y cómo está conformada.

Las mujeres siguen siendo el género predominante dentro del total nacional, con una participación de 51,2 por ciento, mientras que el restante 48,8 por ciento corresponde a los hombres, datos que no muestran mayor variación frente a los dados a conocer por el Dane el año pasado. En el conteo del 2005, las mujeres eran el 51 por ciento de la población y los hombres, el 49 por ciento. En esta ocasión tampoco hubo cambios drásticos en el tema de viviendas. Son cerca de 13,5 millones.

Esta información, dijo Oviedo, tiene el visto bueno de la Comisión de Verificación, respecto a cobertura censal, calidad e idoneidad de la información.

“La base de datos y las proyecciones las publicaremos el 30 de septiembre, será información con características demográficas de individualidad, contexto habitacional, social, económico y también étnico”, indicó.

En cuanto a la composición de la población colombiana, un 9,1 por ciento corresponde a mayores de 65 años; 13,3 por ciento tienen más de 60 años; 22,6 por ciento, menores de 15 años, y el 8,5 por ciento, menos de 5 años.

Se corroboró también un aumento en los índices de envejecimiento del país. Significa que por cada 100 personas menores de 15 años hay 40,4 mayores de 65. En el 2005 era de 20,5 personas por cada 100. Los mayores de 60 son hoy el 58,6 por ciento de la población.

Pero más allá de los datos estadísticos, el funcionario hizo énfasis en los aciertos del este ejercicio censal. Mencionó, por ejemplo, el hecho de que fue una operación incluyente, pues tuvo en cuenta a la población étnica, la obtención de información en lugares especiales de alojamiento, el uso de herramientas tecnológicas (‘eCenso’) para la recolección de la información y para el seguimiento del personal de campo, así como el hecho de que este es el primer censo en el que se recoge el número del documento de identidad para el control de calidad del proceso.

Oviedo también destacó las recomendaciones hechas por el Comité de Expertos, con el fin de mejorar este tipo de ejercicios en el futuro. Señaló que, por ejemplo, es necesario hacer el censo cada 10 años, como lo disponen las normas internacionales, por lo que el siguiente tendrá que ser en el 2027; se debe hacer una planeación presupuestal, contar con teléfonos con planes de datos para la captura de información y tener mayor control del operativo.

Por último, mencionó como parte de esas recomendaciones la necesidad de que el Dane se mantenga actualizado en materia tecnológica y se respete el plazo de tres meses para la realización del censo, dado que en esta oportunidad ese proceso tardó 10 meses.


Tomado del portal del diario EL TIEMPO