Evangelio de viernes 9 de julio de 2021

Foto: ACI Prensa

Fiesta de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, Patrona de Colombia y Reina de la Paz.

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 12, 46-50
Todavía Jesús estaba hablando a la muchedumbre, cuando su madre y sus hermanos se presentaron fuera y trataban de hablar con él. Alguien le dijo: «¡Oye! ahí fuera están tu madre y tus hermanos que desean hablarte». Pero él respondió al que se lo decía: «¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos?» Y, extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: «Estos son mi madre y mis hermanos. Pues todo el que cumpla la voluntad de mi Padre de los cielos, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre».
Palabra del Señor. Gloria a Ti, Señor Jesús.

Meditación
Celebramos hoy la fiesta de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, Reina y Patrona de Colombia. La historia de la devoción a la Santísima Virgen María, en la advocación de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá se remonta al siglo XVI.

Entre los primeros conquistadores del Nuevo Reino de Granada, Antonio de Santana, encomendero de los pueblos de Suta y Chiquinquirá, solicitó al fraile dominico Andrés Jadraque una imagen de la Virgen María, para colocarla en la capilla de Suta. Fue Alonso de Narváez quien pintó en un lienzo de algodón de 1,26 x 1,13 cm a Nuestra Señora del Rosario; y como sobraba espacio pintó al lado derecho a San Antonio de Padua y al lado izquierdo pintó a san Andrés, apóstol.

Al paso de algunos años por la humedad se deterioró el lienzo; roto por algunas partes y deteriorada la pintura, la imagen quedó abandonada. A la muerte de don Antonio, su viuda, se trasladó a Chiquinquirá y llevó consigo el cuadro. Fue María Ramos quien rescató el lienzo y acostumbraba a hacer esta oración: “¿Hasta cuándo, rosa del cielo, habéis de estar tan escondida? ¿Cuándo será el día en que os manifestéis y os dejéis ver al descubierto para que mis ojos se regalen de vuestra soberana hermosura, que llene de alegría mi alma?”.

El 26 de diciembre de 1586 una india que venía de muzo vio que la imagen de Nuestra Señora resplandecía, llenando de claridad toda la capilla. María Ramos llena de asombro vio que toda la pintura estaba renovada completamente; “El rostro de la Madre Santísima duró encendido todo aquel día; después, la imagen quedó tal como hoy se contempla”.

Luego, el Papa Pio VII, la declaró patrona de Colombia en 1829 y fue coronada canónicamente en 1919. El 3 de julio de 1986 san Juan Pablo II visitó a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá y consagró la nación a la Virgen María. En una Eucaristía con cerca de 200 mil peregrinos elevó esta oración: “Oh Virgen, bella flor de nuestra tierra, envuelta en luz del patrio pabellón, eres tú nuestra gloria y fortaleza, madre nuestra y de Dios. En burda tela avivas tu figura con resplandor de lumbre celestial, dando a tus hijos la graciosa prenda de la vida inmortal. Orna tus sienes singular corona de gemas que ofreciera la nación, símbolo fiel del entrañable afecto y del filial amor. A Ti te cantan armoniosas voces y te aclaman por Reina nacional y el pueblo entero jubiloso ofrenda el don de su piedad. Furiosas olas a la pobre nave contra escollos pretenden azotar; tu cetro extiende y bondadosa calma las olas de la mar. Brote la tierra perfumadas flores que rindan culto a tu sagrado altar; prodiga siempre a la querida patria los dones de la paz. A Ti, Jesús, el Rey de las naciones, a quien proclama el corazón por Rey, y al Padre y al Espíritu se rinda gloria, honor y poder. Amén”.

P. John Jaime Ramírez Feria