El contralor General, Carlos Felipe Córdoba, explicó que es necesario que Colombia encuentre una estabilidad fiscal que promueva el crecimiento económico.
Por: Kevin Steven Bohórquez Guevara
La República
Las 15 reformas tributarias que han “ensayado” los gobiernos de turno, desde 1990, no han permitido que aún Colombia encuentre una verdadera sostenibilidad tributaria. Así lo cree el contralor General de la República, Carlos Felipe Córdoba, quien más allá de hablar sobre debate de si se aprueba o no la nueva Ley de Financiamiento, destaca que es necesario que el país encuentre la sostenibilidad fiscal a corto y mediano plazo.
Pese a que advierte que es necesario de entrada fortalecer a la Dian, advierte que se deben dar “soluciones estructurales” que permitan aumentar el recaudo e impulsen el crecimiento.
¿Cuál cree que es el impacto de la caída de la Ley de Financiamiento?
Considero que la Corte Constitucional fue prudente al modular la sentencia y abrir así el espacio que se corrijan los vicios de forma que ellos determinaron hubo en el trámite de la Ley. Sin embargo, considero también que, más allá de los efectos de la decisión y de la suerte de la Ley, es necesario abordar un análisis serio de sostenibilidad fiscal de mediano plazo en el país (…) Es importante tener en cuenta que la Ley de Financiamiento contempla medidas para mitigar algunos de los problemas estructurales del régimen tributario, específicamente para impulsar el crecimiento y la formalidad.
¿Mantiene las críticas al recaudo de la Ley?
He venido insistiendo en que la atención del posconflicto, es decir, el cumplimiento del acuerdo de paz con las Farc compromete recursos por más de $129 billones durante los tres próximos lustros. Allí, únicamente la Reforma Rural Integral, denominada transformación del campo, exigirá en promedio alrededor de $7,4 billones. Por otro lado, si hablamos de lo que se requiere para dar cumplimiento a la Ley de Víctimas y Restitución de tierras necesitaremos no menos de $38 billones anuales hasta 2021. Si bien la Ley de Financiamiento va en la dirección de proveer de recursos al gobierno para financiar estas necesidades, posiblemente serán necesarios esfuerzos adicionales.
¿Cree que lo que se pretende recaudar no es suficiente y será necesaria una reforma estructural?
Sin duda. Entre otras cosas por las razones que he expuesto y porque las metas señaladas por el Marco Fiscal de Mediano Plazo plantean retos importantes para el país. Para 2018 ese Marco señaló que el déficit del Gobierno fue 3,1% del PIB, y para este año el déficit debe reducirse a 2,4% del PIB, lo que exige mayor disciplina fiscal. Esto se logrará con lo planteado por la Ley de Financiamiento. Esta iniciativa contiene medidas para estimular el crecimiento, así como para recaudar más impuestos (…) Desde 1990 hemos ensayado 15 reformas tributarias y no hemos encontrado el equilibrio.
¿Son suficientes las herramientas que se le dan a la Dian?
La Dian debe ser fortalecida en términos de recursos humanos y técnicos. No de otra manera podríamos exigirle mejores resultados en la lucha contra la evasión y la elusión. Con mejor tecnología y capacitación de profesionales, la entidad podría generar mayores recaudos a partir de la identificación plena de quienes deben tributar.
¿Si hay déficit por la Ley de Financiamiento, de cuánto podrá ser?
En eso no cabe el ejercicio de la especulación. El cálculo debe hacerse sobre consideraciones técnicas.
¿Cómo ve el ambiente político para evaluar la reforma?
Ya que hablamos de competencias y atribuciones, no me corresponde calibrar el ambiente político. Solo confío en que las decisiones legislativas sean las más convenientes para el país.
Tomado del diario La República
