Hoy La iglesia celebra la fiesta de los santos mártires Vicente, Sabina y Cristeta de Talavera

Fotografía: Aciprensa
Fotografía: Aciprensa

Vicente, Sabina y Cristeta de Talavera, más conocidos como los Santos Mártires de Talavera, fueron tres hermanos que murieron martirizados en Ávila –actual territorio de España– durante la persecución de Diocleciano, la última y posiblemente más sangrienta persecución a los cristianos en el Imperio Romano.

Según la información que ha sido pública, los tres quedaron huérfanos tempranamente, siendo Vicente, el mayor, quien se encargó del cuidado de sus hermanas.

En los comienzos del siglo IV los hermanos llegaron a Ávila huyendo de las persecuciones. Allí Vicente fue detenido e interrogado por el pretor Publio Daciano, prefecto romano de Hispania y gobernador de la Bética.

Al confesar que era cristiano, Vicente fue requerido para que abjurara de su fe e hiciera sacrificios a los dioses paganos.

Estando en preso fue visitado por sus hermanas Sabina y Cristeta, quienes le suplicaron que escapase con ellas. Aunque al inicio no quiso hacerles caso, finalmente fue convencido y huyeron.

En la Sierra de San Vicente (provincia de Toledo) se encuentra la cueva donde estuvieron ocultos los tres santos durante la búsqueda ordenada por Daciano. Tiempo después fueron capturados cerca de Ávila y martirizados con crueldad.

A la fecha sus restos se encuentran en la Basílica de San Vicente en Ávila.

Crédito: Aciprensa 


Redacción: Luisa Fernanda Escobar