La Cepal calcula que la economía local registraría una caída de 5,6% al cierre de este año

Foto: CEPAL / Gráfico LR-ER

Los países de la región que sufrirán las mayores bajas en su economía son Perú con -13%, Argentina con -10,5% y Brasil con -9,2%

Por: Paola Andrea Vargas Rubio

La República

Luego de casi cinco meses en el vecindario, el covid-19 no solo está cobrando la vida de cientos de personas cada día, sino que también está conduciendo a que las economías de la región estén a punto de sellar una década perdida otra vez, debido a que el PIB volverá a estar al nivel que alcanzó en 2010 con un desplome de 9,1% al cierre del año, resaltó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

De acuerdo con la información contenida en el documento titulado ‘Enfrentar los efectos cada vez mayores del covid-19 para lograr una reactivación con igualdad: nuevas proyecciones’ de la Cepal, la economía colombiana será una de las que menos caerá al cierre de este año, ya que presentará una contracción de 5,6% (en abril se anunció que la caída sería de -2,6%).

Con esta actualización, se puede destacar que esta proyección está entre las más positivas para la economía local, ya que el Fondo Monetario Internacional (FMI) detalló en su último informe que el PIB nacional registraría una caída de 7,8%.

Mientras que el Banco Mundial señaló en su reciente actualización que la contracción de la economía colombiana sería de 4,9% y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) anotó que la baja podría ser de 6,1% sin segunda ola de contagios o de 7,9% con un nuevo brote de covid-19.

Teniendo en cuenta estas proyecciones, Wilson Solano, coordinador área económica de la Facultad de Ciencias económicas y administrativas de la Universidad El Bosque, aseguró que “esperemos que toda esta situación nos lleve a estructurar mejor y a afianzar el sistema de salud en Colombia, de una manera semejante a lo ocurrido con el sistema financiero a finales de los 90, con la llamada crisis inmobiliaria. Hoy la banca colombiana es una de las más consolidadas y de mayor respaldo del mundo, ya que para el año de 1999 nos encontrábamos con los peores resultados económicos en muchas décadas: PIB de -4,2%, devaluación de 22% y una alta tasa de desempleo en 20%”.

Las previsiones para la región
De acuerdo con Bárcena, el país que sufrirá las mayor caídas en su economía es Perú con un desplome de 13%. Sobre la situación que enfrenta la economía peruana, una de las más afectadas por la pandemia, Juan Carlos Ocampo, coordinador de la carrera de Economía en la Universidad Privada del Norte, explicó que “esta caída del PIB tiene su origen principalmente en la reducción de la inversión privada y las exportaciones”. Sin embargo, la recuperación de la economía china en el segundo semestre de este año podría ayudar en la recuperación de las exportaciones del país, ya que el gigante asiático es el principal socio comercial del país vecino, añadió Ocampo.

La difícil situación que enfrenta Perú, con una caída del PIB por encima del promedio regional (-9,1%) también se debe a que a nivel sectorial los segmento más golpeados han sido la construcción, comercio y manufactura, dijo Ocampo. Este panorama llevará a que Perú junto con sus pares de Ecuador, y Argentina sean los países de la región que registrarán una variación de 6% o más en el índice de Gini, según la Cepal.

Los otros países que registrarán las mayores caídas en el indicador del PIB en la región son Argentina (-10,5%), Brasil (-9,2%), Ecuador (-9%), México (-9%) y Chile (-7,9%). Estas nuevas proyecciones que en todos los casos presentaron revisiones a la baja de hasta de nueve puntos porcentuales se debe a diferentes factores tanto internos como externos, entre los que se destacan la caída de los precios de los productos primarios y térmicos de intercambio, reducción del comercio de bienes, reducción de las remesas, menor demanda de servicios turísticos y alta incertidumbre y permanente vulnerabilidad financiera.

La agudización de estos desafíos se ve reflejada en que, por ejemplo, se tiene previsto que las exportaciones de la región en términos de valor registren una contracción de alrededor de 23%, con una disminución de los precios de 11% y una contracción del volumen de 12%.

Debido a escenarios como el anterior es que la Cepal ha venido profundizado las caídas del PIB del vecindario. Esto se evidencia en que para diciembre de 2019, el organismo internacional señaló que la economía regional podría presentar un crecimiento de 1,3%, mientras que en marzo de este año redujo su previsión a -1,8%, en abril a -5,3% y en julio a -9,1%.

A lo anterior se le suma que “la tasa de desocupación regional se ubicará alrededor de 13,5% al cierre de 2020, lo que representa una revisión al alza (dos puntos porcentuales) de la estimación presentada en abril y un incremento de 5,4 puntos porcentuales respecto del valor registrado en 2019 (8,1%)”, dijo la secretaria general de la Cepal durante la presentación de la actualización de las proyecciones, lo cual no es muy positivo.

El ingreso que propone la Comisión para mitigar el impacto del covid-19
“La Cepal propuso el ingreso básico de emergencia como instrumento de protección social, un bono contra el hambre equivalente a 70% de una línea de regional pobreza extrema (US$67 de 2010) y cuyo costo total sería de US$27.100 de millones, es decir, 0,52% del PIB regional, y varias iniciativas de apoyo a empresas y trabajadores. Para la implementación de cualquiera de estas líneas es necesario fortalecer el rol de las instituciones financieras internacionales para apoyar a los países”, dijo Bárcena.


Tomado del portal del diario La República