Muere Radomir Antic, técnico del ‘doblete’ del Atlético

Foto: Los aficionados del Atlético celebran el triunfo del Atlético en la Copa de 1996 con Antic, en La Romareda.

El preparador serbio, de 71 años y el único que ha dirigido al Real Madrid, el Barcelona y el equipo rojiblanco, condujo a los ‘colchoneros’ a los títulos de Liga y Copa en 1996

Por: Ladislao J. Moñino

EL PAÍS (ES)

Radomir Antic (Zitiste, Serbia, 1948) ha fallecido este lunes a los 71 años de edad tras no poder superar un cáncer que padecía desde hace varios meses. Aunque en España entrenó al Zaragoza, al Real Madrid, al Barcelona, al Oviedo y al Celta, su figura está muy ligada al Atlético de Madrid. Antic fue el entrenador del histórico doblete rojiblanco en la temporada 95-96. Para alcanzar ese hito relanzó a un equipo que había coqueteado con el descenso a Segunda División, posteriormente consumado en junio del año 2000, también con él en el banquillo, al que había regresado como último recurso para intentar la salvación. Antic era el único que podía presumir de haber dirigido a los tres grandes del fútbol español. “Nos ha dejado Antic, un hombre que dignificó la profesión de futbolista, historia de nuestro Atleti, campeón y leyenda rojiblanca porque Radomir siempre estará en los corazones de todos los atléticos. Mis condolencias y todo mi ánimo para sus familiares y amigos. DEP”, escribió Fernando Torres en sus redes sociales.

Como jugador fue un central de buen juego aéreo y pie aceptable que hizo carrera en el Partizán de Belgrado, el Fenerbahçe, el Zaragoza y el Luton Town. De su paso por Inglaterra trasladó a su etapa como técnico la importancia de las jugadas a balón parado, y la fe inquebrantable en el 4-4-2. Al juego ofensivo le aplicó la libertad del talento individual de la cultura deportiva balcánica. Entusiasta del ajedrez, sus planteamientos partían de un orden defensivo y posicional que rompía ataduras en ataque.

Inició su carrera como entrenador en el Partizán de Belgrado, donde ya le echó el ojo a Milinko Pantic, uno de los pilares del doblete del Atlético. Su primer equipo en España fue el Zaragoza, al que llegó a clasificar para la Copa de la UEFA.

A mediados de la temporada 90-91, con el Barcelona disparado hacia la primera Liga de la era Johan Cruyff, fue reclutado por el Real Madrid como una solución interina hasta final del curso. Los buenos resultados y su sintonía con la mayoría de los componentes de la Quinta del Buitre, que afrontaban la entrada en la recta final de sus carreras, le valieron la continuidad. A Butragueño le dio libertad y le eximió de responsabilidades defensivas, a Míchel le dio alas para que volviera a correr y centrar por la banda y a Sanchís lo reactivó. Quizá su mayor aportación individual fue colocar a Fernando Hierro en el centro del campo. En su segunda temporada en el Bernabéu vivió uno de los episodios más rocambolescos de la historia merengue. Fue destituido a mitad de temporada con el equipo liderando la tabla. El Madrid terminó perdiendo la primera de sus ligas en Tenerife. “Eras un padre que el fútbol me puso en la vida. Mis abrazos de amor a mi otra familia y en especial a nuestra Vera. DEP. Por si no estaba triste, hoy estoy devastado. Grande en todos los sentidos de su vida y jamás te estaré lo suficientemente agradecido. Sé que lo sabías pero no está de más que te lo lleves para siempre”, se sinceró Míchel. “Hiciste más grande al Atleti, hiciste más grande nuestra rivalidad. Adiós a una trayectoria única: Atlético, Barcelona y Real Madrid”, le despidió Sergio Ramos. “Nos has dejado una entrañable huella como atléticos. ¡Te recordaremos hoy y siempre! Gracias Mister, gracias Radomir”, publicó Simeone.

Tras tres años en el Oviedo, Jesús Gil le fichó para el Atlético. Conquistó la Liga y la Copa, en final ganada al Barcelona, con un fútbol ofensivo iniciado en los pies del meta Molina y los centrales Santi y Solozábal. Simeone y Vizcaíno le dieron kilómetros y goles llegando desde la segunda línea, Pantic hizo del balón parado un arte letal, Caminero y Kiko ponían la imaginación y Penev ejerció de killer del área. “De la época aquella era un innovador. Nosotros con una manera antagónica a lo que venía jugando el Atlético de Madrid y de estar dos años a punto de descender… nos sorprendió en verano pero mira luego. Jugando con dos tanques como Penev y yo. Me sacó cosas que ni yo mismo sabía que tenía, nos quitó los miedos y los complejos. Va a quedar en los anales del conjunto rojiblanco de una manera importante, logrando un doblete viniendo de abajo”, ha relatado Kiko en la cadena Ser. “Hoy no se ha muerto solo mi Míster, ha muerto mi amigo, alguien que era como un padre para mí, un abuelo para mis hijas… eternamente agradecido, sin él yo no estaría aquí. Descansa en paz”, le agradeció Pantic.

El doblete hizo eterno el cántico de Radomir te quiero en el Vicente Calderón. Su salida del Atlético en 1998 se produjo tras un deterioro correlativo de su relación con las vacas sagradas del vestuario. Solozábal, Simeone, Penev y luego Vieri y Futre, tras su regreso, fueron sus víctimas. Su paso por el Barcelona también fue una solución de emergencia a mitad de temporada. Luego, la selección Serbia y el fútbol chino cerraron la etapa en los banquillos de uno de los técnicos más importantes del fútbol español de finales del siglo XX.

EL PALMARÉS DE ANTIC

Como jugador:

– Una liga yugoslava con el Partizán de Belgrado (1975-1976).
– Una liga turca con el Fenerbahçe (1977-1978).

Como entrenador:

– Dos ligas yugoslavas con el Partizán (1985-1986 y 1986-1987).
– Una Liga española (1995-1996).
– Una Copa española (1995-1996).


Tomado del diario EL PAÍS (ES)