Sor Augusta: las mujeres continuaremos defendiendo la vida en la Amazonia

Foto: Vatican News

Se presentó este miércoles, 12 de febrero, en la Oficina de Prensa de la Santa Sede, la Exhortación Apostólica Post-Sinodal del Santo Padre Francisco “Querida Amazonia”, con la participación de los Cardenales Lorenzo Baldisseri y Michael Czerny, el Padre Adelson Araújo dos Santos, Sor Augusta de Oliveira, el profesor Carlos Nobre y Monseñor David Martínez de Aguirre Guinea.

Debora Donnini – Ciudad del Vaticano

“Soñamos por y con la Amazonia”. Este es el camino que, para la hermana Augusta de Oliveira, Vicaria General de las Siervas de María Reparadora, el Papa indica con “Querida Amazonia”. Con palabras ricas de amor y gratitud, la religiosa, cuya Congregación está presente desde hace 100 años en la Región Panamazzónica, retoma la Exhortación del Papa a comprometerse con los derechos de los más pobres, de los indígenas, de los afroamericanos, de las mujeres, de las personas que trabajan en el campo y en las ciudades: en todos esos escenarios que el Sínodo de octubre pasado trajo, con decisión, a los ojos de la Iglesia. El protagonismo de los laicos es importante, se necesita coraje misionero y profético, recuerda evocando las experiencias de la REPAM, la Red Eclesial Panamazónica y otras asociaciones y definiéndolas “un grito por la vida”. Como mujer, en su corazón resuenan con emoción las palabras del Papa sobre la presencia de mujeres “fuertes y generosas” que han mantenido a la Iglesia en pie en esos lugares, transmitiendo la fe cuando incluso durante décadas “ningún sacerdote pasó por esas partes”. Y asegura que las mujeres continuarán con su compromiso en defensa de la vida amenazada en la Amazonia, porque la presencia de las mujeres se encuentra en las fronteras más remotas. La religiosa recuerda las muchas vidas donadas por los misioneros en tierra amazónica, sacerdotes, consagrados y laicos. En la conferencia de prensa de presentación de la Exhortación Post-Sinodal, vuelve varias veces el testimonio de la hermana Dorothy Stang, asesinada por unos criminales hace exactamente 15 años en Anapu, Brasil, precisamente por su compromiso contra la deforestación. Siempre al lado de los campesinos y trabajadores, murió con sólo la Biblia en sus manos. Las palabras de la Hermana Augusta de Oliveira son de gratitud al Papa por este camino sinodal que ha abierto procesos gracias a los cuatro pilares, es decir, los cuatro “sueños”, propuestos por Francisco, el social, el cultural, el ecológico y sobre todo el pastoral.

“Sueños” sobre los cuales se detiene en modo preferencial el Padre Adelson Araújo dos Santos, profesor de Espiritualidad de la Pontificia Universidad Gregoriana, que participó como experto en el Sínodo. Es la poesía lo que le llama la atención, así como el amor del Papa, ese tener preocupación por cuidar a nuestros hermanos y al medio ambiente, porque – señala – quien ama, cuida. La palabra “sueño” sigue la tradición bíblica, sólo hay que pensar en el sueño de José y en el de San José, el esposo de María, cuando se convierte en el lugar donde Dios revela sus designios. No sólo el Papa Francisco, sino también Benedicto XVI utilizó el mismo recurso lingüístico, enseñando a los jóvenes que ningún sueño es inalcanzable cuando el Espíritu de Dios lo suscita. Y así, en cada uno de los cuatro sueños compartidos por el Papa en “Querida Amazonia” se puede reconocer ese llamado a la conversión formulado por los padres sinodales en el Documento Final.

Para trazar toda la génesis de la Asamblea Sinodal, desde el anuncio del Papa en el Ángelus del 15 de octubre de 2017, fue el Cardenal Lorenzo Baldisseri, Secretario General del Sínodo, quien recordó, entre otras cosas, la amplia consulta del pueblo de Dios en la Amazonia, en la fase preparatoria, y luego la rica participación en el Sínodo con la significativa presencia, entre otros, de 25 expertos y 16 representantes de pueblos indígenas. Un proceso plasmado en el Documento Final, enmendado en los Círculos Menores, y luego votado por una mayoría de dos tercios. Un texto finalmente entregado al Papa y por su voluntad hecho público. Respondiendo a una pregunta sobre la Episcopalis communio sobre el Sínodo de los Obispos, el Cardenal Baldisseri dejó claro que el documento final del Sínodo para la Amazonia no tiene la aprobación expresa del Papa, que insta a que sea leído. Por lo tanto, como no hay una palabra clara de aprobación, este documento tiene “cierta autoridad moral” pero no es magisterio ordinario. El Director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni, subrayó también que este documento debe ser leído a la luz de la Exhortación “Querida Amazonia” – que forma parte del Magisterio ordinario del Sucesor de Pedro – y por lo tanto para su aplicación. La Exhortación lleva la firma de San Juan de Letrán, algo que sucede – aclaró – cuando se reconoce una connotación particularmente pastoral.

También fue importante la intervención del Profesor Carlos Nobre, científico y Premio Nobel de 2007, que lleva años ocupándose de cuestiones ecológicas y acoge con satisfacción esta Exhortación porque se refiere a un modelo de desarrollo en el que nadie se queda atrás. Por lo tanto, pide la integración de la antigua sabiduría indígena con las nuevas tecnologías para encontrar una tercera vía que no sea la de la conservación pura ni la del desarrollo de alta intensidad, sino que conduzca al cultivo de la Amazonia sin destruir este corazón del planeta. También intervino con un vídeo Monseñor David Martínez de Aguirre Guinea, Secretario Especial del Sínodo de Obispos para la Región Panamazzónica y Obispo del Vicariato de Puerto Maldonado, donde – recuerda – que en 2018 comenzó la historia del Sínodo. Fuerte fue el estímulo del Papa para buscar nuevos caminos para el encuentro con Cristo, subrayó el Prelado, con el desafío de estar cerca de los más vulnerables. Una exhortación, entonces, que es como un poema de amor que llora por los crímenes y se maravilla de la belleza de esta tierra. El Cardenal Michael Czerny, Secretario Especial del Sínodo, también señala que la Amazonia ha impresionado al Papa por su belleza y, al mismo tiempo, por su sufrimiento, y que la Exhortación, que comienza como una carta de amor, nos recuerda que sólo se puede salvar lo que se ama.


Tomado del portal Vatican News