Con el fin de hacer seguimiento a su estado y de paso generar sentido de pertenencia y conciencia sobre la riqueza natural del Tolima, un grupo de jóvenes comenzó en 2019 esta idea, que cuenta también con el apoyo del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam.
El glaciar a monitorear será schimmer, ubicado en el costado noroccidental del nevado, conocido por estar junto a una de las insignias del Nevado del Tolima, el Espolón del Gusano.
“Se da la oportunidad de que Jorge Luis Ceballos, Andrés Cruz y yo trabajemos para crear un taller en pro de la comunidad, cuando este se da, damos inicio a la red y la comunidad dice vamos a monitorear el nevado del Tolima”, afirmó Saida Martínez, fundadora de la red.
Para la joven es importante reconocer las funciones de un glaciar, y sobre todo por qué el Nevado del Tolima es de los pocos a nivel mundial que aún los conserva.
“Es tan importante porque los glaciares tropicales en realidad deberían estar extintos. Somos muy afortunados todavía de contar con unos cuantos en Colombia, seis de los cuales, dos son sierras, los otros están inmersos en el Parque Nacional de los Nevados y uno que está en el Nevado del Huila”, agregó Martínez.
Refirió que la intención del proyecto es dejar constancia del retroceso del glaciar para que las futuras generaciones tengan un precedente y este no pase inadvertido. De hecho este mismo ejercicio se hace en el Nevado de Santa Isabel; no obstante, el Nevado del Tolima sería el primero que contaría con personal del común en su implementación.
“Se consolida no solo la participación de montañistas, sino que también están sumergidos campesinos, personas que les gusta el tema, docentes y estudiantes. (…) Sería en el Tolima la primera red no consolidada en la cual una comunidad no científica monitorea un glaciar”, refirió.
‘Adopta una baliza’
Esta campaña liderada por los coordinadores del proyecto busca que los ciudadanos puedan apersonarse del mismo apadrinándolo para que pueda llevarse a cabo.
“Lo que buscamos es que cualquier colombiano pueda dar su aporte entre 20, 50 y 100 mil pesos para adoptar una baliza. En esa expedición científica vamos a poner el nombre de cada colombiano que ha decidido dar su aporte en el tubo de PVC (la baliza) y cada mes va a recibir un informe con fotografías de cómo está el glaciar del Tolima”, afirmó Marcela Fernández, fundadora de Cumbres Blancas.
Además, quienes deseen sumarse a la causa podrán asistir a talleres y charlas enfocadas en el tema.
Serán alrededor de 12 personas quienes se encargarán de la instalación de las balizas bajo la asesoría del glaciólogo Jorge Luis Ceballos, profesional especializado del Ideam.
El valor de cada baliza es de $1’.500.000 contando la mano de obra que constará de seis días de expedición. Son siete balizas en total las que se instalarán.
¿Para qué sirven las balizas?
Son tubos de PVC que se instalan perforando el hielo de manera vertical.
Estos miden aproximadamente seis metros y están divididos en tres tramos de dos metros cada uno. En el momento de la instalación se dejan alrededor de 40cms que se conocen como la zona de emergencia y es en la que se va a verificar el comportamiento del glaciar.
“Si hay menos de 40 cms por fuera de la superficie pues probablemente está ganando y si se muestra más de 40 cms, está perdiendo”, comentó Martínez sobre el espesor del glaciar.
Esto se verificará en las próximas visitas después de la instalación.
Fuente: El Nuevo Día
