Queiroz y el decálogo con el que empieza su era en Colombia

Foto: Carlos Ortega / EL TIEMPO

La Selección volvió a tener DT en propiedad. Estas son las primeras ideas del portugués.

  1. Los referentes, respaldo total

Queiroz construiría su proceso en la Selección con base en los referentes. “Falcao, James y Ospina hacen parte del alma del equipo. Hay que empezar por ahí. Creo que es sensato pensar todo el esquema alrededor de ellos. Seguro que harán parte importante de mi análisis y sobre todo de las conversaciones con mis jugadores. Es muy temprano para hablar de respuestas concretas, no me quiero comprometer con decisiones, primero hay que pensar y analizar”.

  1. James Rodríguez, atención especial

“Con James Rodríguez fue el primer jugador que hablé. Seguro que, para un jugador del calibre de él, jugar siempre y mucho es lo más importante, pero hay que saber que cuando se está en Real Madrid, Manchester United o Bayern Múnich, con los grandes jugadores del mundo, algunas veces unos jugadores se tienen que sacrificar y no pueden jugar siempre. Hay que construir el futuro en torno a James, porque es el corazón del equipo”.

  1. Su estilo, el arte de ganar

Cuando se conoció el interés de Colombia por contratar a Carlos Queiroz, una de las críticas era que se trataba de un entrenador defensivo. El portugués respondió en la rueda de prensa cuál era su estilo de juego, para aclarar esas dudas. “Muchas veces en mi vida me han hecho esa pregunta, después de más de 35 años de experiencia respondo que me gusta el estilo de jugar un partido, respetar para ganar un partido. Si hay que bailar rock and roll o bailar samba para ganar un partido, lo haremos”, declaró el entrenador nacido en Mozambique, y agregó: “El fútbol es un juego sencillo, con jugadores y personas sencillas, que se complica porque todos quieren lo mismo, quieren ganar. Hay que salir a disfrutar y con el honor de hacer felices a los aficionados”.

  1. Su filosofía, mentalidad ganadora

“Si quieres ser campeón, hay que ser campeón todos los días. Hay que prepararse como campeones, en una cancha de campeones con una actitud de campeones. Al final, tenemos que sentirnos campeones en todas las cosas de la vida. Es una actitud que nos llega a discutir abiertamente entre todos. Mi opinión es que hay que buscar las necesidades para tomar decisiones. Y no tomar decisiones sin saber las necesidades. Me gusta que las cosas salgan con buena planeación”.

  1. Selecciones menores, coordinación total

“Comencé en el fútbol profesional, pero luego cambié al fútbol de formación. Aprendí mucho de cómo desarrollar el futuro del fútbol en un país. El fuerte que tenemos en mi trabajo es que hay que tener los ojos en el presente, y el presente es el equipo de mayores, esa es la primera prioridad de un trabajador, pero no solo podemos quedarnos ahí y debemos tener los ojos en el futuro, teniendo la certeza de que es necesario el trabajo de base, trabajar con los juveniles para ponerlos en el fútbol de élite”.

  1. El legado de Pékerman, continuidad y mejora

“Voy a intentar hacer lo mejor para que, en primer lugar, pueda cuidar bien del patrimonio que se ha desarrollado mucho en los últimos años en el fútbol en Colombia con José Pékerman. Partiendo del presupuesto que estamos haciendo bien, hay que intentar ser mejor todos los días y la misión que tengo es con la organización, los jugadores, es ver cómo y en dónde podemos mejorar. Si queremos tener más y mejores resultados excepcionales, hay que ser excepcional y ser muy bueno”.

  1. Ejes de trabajo, compromiso, ética, planeación

“El trabajo de selección ha influido en la vida. Tiene mucha influencia el trabajo de los clubes. Tienes 23 o 24 jugadores que vienen de situaciones y momentos diferentes. Mi opinión es pensar en las necesidades para luego tomar las decisiones. Los principios importantes del trabajo son el compromiso de los jugadores, todos debemos estar comprometidos con la misión, la ética del trabajo. Me gusta que las cosas salgan con buen rendimiento, y cuando trabajas con ese espíritu todo saldrá mejor”.

  1. Técnicos locales, en contacto

Queiroz dijo que tendrá permanente contacto con los entrenadores de los clubes colombianos. “Es fundamental. No es posible tener éxito sin la unión de todas las personas que están en el fútbol. El contacto, la comunicación y la cooperación son fundamentales. Hablar de las cosas es importante. Debe haber una unión de todas las personas que están en el fútbol y que son personas decididas por el fútbol; al final, los entrenadores tienen a los jugadores. Nosotros trabajamos tres o cuatro días con ellos, mientras que sus entrenadores siempre los tienen. En conversaciones con el presidente, es mi intención tener entrenadores nacionales, lo hice en Sudáfrica, Estados Unidos e Irán. Es importante tener contacto con ellos para conocer la cultura del país”, explicó.

  1. Microciclos, de vuelta

Queiroz trabajará con los jugadores del medio local. “Me enteré de los microciclos de trabajo, pero quedé contento de saber que existen para probar en periodos que no solo están conectados con el periodo Fifa. Son importantes para desarrollar un proyecto con jugadores que no están Europa. Cada vez que pueda los usaré”, dijo, y agregó: “Los estadios de fútbol son mi casa. Cada partido es importante para un entrenador. Veo fútbol aquí, en Europa, pero principalmente tengo que ver dónde están los jugadores que deben tener mi atención. El fin de semana voy a ver a Santa Fe”.

  1. Copa América, el primer objetivo

A José Pékerman le criticaron no haber ganado la Copa América, en dos participaciones. Queiroz dijo al respecto: “No puedo garantizar que vamos a ganar, pero puedo decir que en todos los partidos tendremos eso en la mente. Siempre hablo con los jugadores de equipos nacionales y digo que siempre hay que jugar para poner la camiseta en una mejor posición, y eso solo se hace si ganamos. Pero el fútbol es un juego sencillo, jugadores y personas sencillas que se complican, porque todos quieren lo mismo, quieren ganar. Hay que salir a disfrutar y con el honor de hacer felices a los aficionados”.


Tomado del portal del diario El Tiempo