Tras una caída histórica del PIB en el segundo trimestre, hay expectativa de una mejora en lo que resta del año. Un posible rebrote, entre los retos.
Ante un choque histórico que ha recibido la economía mundial y la colombiana por cuenta de la pandemia por coronavirus, y que se ha traducido en la pérdida de un poco más de 4 millones de empleos y la destrucción del tejido empresarial; se espera un mejor ritmo de recuperación para el 2021, según el comportamiento de los contagios y las medidas del Gobierno.
(Lea: Todo lo que debe saber sobre la ‘nueva normalidad’ en el comercio)
Cabe recordar que tras un primer semestre en el que la economía creció apenas 1,1%, comportamiento que tuvo que ver con la llegada del virus al país en marzo, el segundo trimestre representó una caída histórica para el PIB del país a 15,7%. Y las actividades de comercio, construcción y manufactura impulsaron gran parte de esa reducción.
(Lea: Estímulos, salvar firmas, confianza y exportar: ‘guía’ de recuperación)
Ante ese panorama, el Gobierno empezó a implementar algunas medidas para mitigar el choque abrupto que sufrió la economía, que incluyen programas sociales para los más vulnerables, algunos créditos para empresas y el subsidio a la nómina y a la prima para las organizaciones más afectadas. Y a eso se suma un plan de reactivación para crear al menos 1,7 millones de empleos, denominado por el Gobierno como ‘Compromiso por Colombia’.
(Lea: Ingredientes que debería tener el cóctel de reactivación de Bogotá)
Con algunas de esas medidas, y el levantamiento del aislamiento obligatorio preventivo en todo el país desde septiembre, el Gobierno tiene proyectado que la economía modere su caída y ésta llegue al 5,5%.
Esta perspectiva contrasta con la de algunos centros de pensamiento económico, como Fedesarrollo, que dicen que el rango de contracción de la economía para este año estaría entre 5% y 7,9%; o como las del Banco de la República que calcula que podría estar entre 6% y 10% y organismos internacionales como el FMI o la Cepal, que creen que podría estar en -7,8% y -5,6%, respectivamente.
Si bien las proyecciones del Gobierno son optimistas con respecto a la de otros pronósticos, expertos señalan que incluir reformas estructurales urgentes; que se maneje de mejor manera un posible rebrote, y unos planes adicionales para los más afectados por la pandemia, podría lograr un mejor panorama para el 2021 y para lo que queda de año.
Para Andrés Giraldo, director del departamento de economía de la U. Javeriana, “todavía está el problema del empleo, que está en cuidados intensivos para lo que hay que seguir implementando medidas para proteger los puestos de trabajo.
Por otro lado, es clave que se siga manteniendo los programas sociales como Ingreso solidario para que no haya un impacto mayor en la pobreza. Si hay un rebrote y no se profundiza en estos planes de intervención, difícilmente se llegará a la meta del Gobierno”, dijo.
En ese sentido, Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, ha destacado en varias ocasiones que el país podría lograr una senda de crecimiento incluso mejor que la que veía antes de la pandemia si implementa algunas reformas clave como la laboral, tributaria y unas que promuevan la sostenibilidad y la equidad.
Ante ese panorama, las expectativas del Gobierno apuntan a que la economía crezca en 2021 6,6% y otras proyecciones dicen a que el alza oscilaría entre 2,8% y 5,5%.
EL RETO DEL DESEMPLEO
El otro reto que enfrenta la economía es el desempleo, que ronda el 20% desde que se empezaron a sentir los efectos de la pandemia. Y entre los grupos poblacionales más golpeados están las mujeres, los informales y los jóvenes, quienes tienen niveles de desocupación superiores al promedio nacional.
Por ejemplo, para el caso de ellas, éste indicador llegó en julio a 26,2%, el más alto de la historia. Para los expertos, una senda de recuperación más sostenible dependerá en gran medida del foco a los más afectados.
Tomado del portal del diario Portafolio
