Lluvias impiden reanudar la remoción de los escombros. Esperan que ladera logre estabilizarse.
La ministra del Transporte, Ángela María Orozco, señaló que por lo menos tres meses va a estar cerrada la vía al Llano, ante las dificultades que se presentan en la remoción del material que cae de la montaña en el kilómetro 58.
La ministra del Transporte, Ángela María Orozco, señaló que por lo menos tres meses va a estar cerrada la vía al Llano, ante las dificultades que se presentan en la remoción del material que cae de la montaña en el kilómetro 58.
Las condiciones de seguridad no son las ideales para que los operarios de la concesionaria Coviandes adelanten los trabajos de retiro del material a lo largo de unos 200 metros de la calzada, estimando unos 30.000 metros cúbicos de escombros.
Ingenieros consultados por EL TIEMPO indican que en condiciones normales el trabajo de despejar la vía pueden tardar entre una y cuatro semanas, pero en el kilómetro 58 por las permanentes lluvias, el movimiento de la montaña detectado por un radar instalado en Mesa Grande y los permanentes deslizamientos no se podría hacer un estimativo preciso.(Colapsa puente por derrumbe en el kilómetro 58 de la vía al Llano)
El domingo en la tarde tuvieron que parar las labores de remoción de material por falta de condiciones de seguridad para los operarios y en la madrugada de este lunes no han podido reanudar los trabajos porque continúan las lluvias y hay nubosidad en Guayabetal.
El ingeniero William Valencia Campos, de la Sociedad de Ingenieros del Meta, sostiene que en condiciones de seguridad ideales las labores de remoción de escombros pueden tardar una semana, mientras que el ingeniero Orlando Barbosa, dice que para dar vía en un carril unos tres días y los dos carriles una semana.
Otro ingeniero que durante varios años trabajó en la vía, pero que pidió no se revelara su identidad, sostiene que con buenas condiciones climáticas esas labores podrían tardar un mes.
El problema, expresó por su parte Barbosa, es que hasta el momento ladera no ha dado muestras de estabilizarse, lo que pone en riesgo a los trabajadores que hacen las labores de remoción del material y el régimen de lluvias tampoco ha cesado.
De otra parte, se espera un pronunciamiento que harán los alcaldes y la gobernadora del Meta, Marcela Amaya, que se reúnen este lunes para evaluar situación de la vía y los efectos sobre sus comunidades.
Tomado del portal del diario EL TIEMPO
